• ¿Quieres apoyar a nuestro foro haciendo una donación?, entra aquí.

Aventuras de un Joven ABC1 - nº1: La Suegra

Estado
No está abierto para más respuestas.

romandres

Exiliado
Registrado
2015/02/27
Mensajes
1
Sexo
Macho
Soy un joven santiaguino bordeando los 30 años. Nací y crecí en una familia tradicional chilena ABC1, religiosa y numerosa, donde el tema sexual fue un verdadero tabú. Fui educado en un colegio particular del sector oriente de Stgo. Muchos amigos y amigas se casaron vírgenes, siempre con gente del mismo círculo social. Sin embargo me declaro anonimamente un hombre muy caliente, lleno de fantasias de las que seguramente muy pocas ocurrirán.

Aqui va una que ocurrió y nunca olvidaré. No escatimé en detalles, así es que si quieres un relato rápido y al grano este no aplica mucho que digamos, jeje...

En el colegio tenía una compañera que siempre me gustó. Yo era tímido y nunca me acerqué a ella. Entramos a la misma universidad y ahí nos reencontramos. No muy convencido comencé con ella una relación. Tremenda fue mi sorpresa cuando conocì a su madre! Rubia natural, ojos claros, se mantenía estupenda a sus cuarenta y tantos. Tenia unas tetas impresionantes. Yo realmente fantaseaba mucho con mi suegra, pero nunca me insinué porque querìa mucho a mi polola y le haría mucho daño si ella descubría que fantaseaba mas con su madre que con ella.

Luego de varios años de pololeo, en los que ambos nos mantuvimos virgenes por convicción moral y religiosa, terminamos la relación. Meses despues, superado el duelo, me encontré de casualidad en el Parque Arauco con mi exsuegra, estaba más MILF que nunca. Se me vino a la cabeza una idea loca: ahora que todo terminó con mi ex, me sentí "libre" para coquetear con mi exsuegra. Nos tomamos un café, conversamos, y algo titubeante dije toda la verdad.

"Eres una mujer muy atractiva. Solia pensar más en tí que en tu hija. Sueño con que me aceptes una invitación fugaz a tomar un trago a mi departamento" le dije. Esperaba una cachetada, o al menos que se despidiera incómoda y se fuera. Pero grande fue mi sorpesa cuando ella me sonrió y me dijo "no soy tonta... obvio que me daba cuenta que me mirabas". "Acepto tu invitación pero sólo un trago, que estoy apurada".

Llegamos a mi departamento. A partir de entonces como que sentí mucha confianza en mi mismo y perdí mi timidez. Ella en cambio se puso nerviosa, tímida. La invité a sentarse en el sillón. Eran aprox las 7pm. Nos servimos un baileys. Conversamos y yo la miraba fijamente. "Tus ojos me vuelven loco" le dije, e inmediatamente se puso nerviosa y sonrió. Me dijo que me echaba de menos en su casa y me abrazó. En ese momento no resistí la tentación y le besé el cuello. Luego le besé la oreja. Ella no opuso ninguna resistencia. "Cierra los ojos" le dije. La besé en la boca. Yo realmente no lo podía creer. Se me estaba cumpliendo un sueño.

Fue un beso apasionado. Con mucha lengua. Humedo. Caliente. "Nunca me habia besado otro hombre que no fuera mi marido.... menos un expololo de mi hija!... Me encanta..." me dijo. Así es, es una mujer felizmente casada que aparenta ser educada y moral, pero esconde una fiera dormida, salvaje y sensual. Y yo la estaba despertando.

Le abrí la blusa que llevaba puesta. Le quité el sostén, sin dejar nunca de besarla. La tumbé boca arriba en mi sillón y comencé a besarle sus tetas deliciosas. La tocaba sin parar. Mi lengua lamía sus pezones. Me devoré sus pechos grandes, dándole pequeños mordiscos en sus pezones hermosos que no tardaron en endurecerse. Comenzó a gemir de placer. Se movía entera.

Bajé con mi boca hasta su ombligo, luego abrí sus jeans y se los quité lentamente. Ella solo se dejaba besar. Tenia frente a mi la vagina mas rica que habia visto en mi vida. Le besé primero sus muslos, luego los alrededores de su vagina. No estaba completamente depilada. Cuando sintió mi cabeza entre sus piernas se volvió loca de placer. Comenzó a gemir mas fuerte, "ahh que ricooo! Sigue no pares!!" repetía una y otra vez. Mi boca se abrió grande y le devoré su vagina rica. Succionaba, mientras mi lengua jugaba con su clitoris. La vagina de mi exsuegra realmente es una delicia. Ella movía con impetu su pelvis. Gritaba y se movia de placer. El morbo de la situación lo hacia increiblemente excitante.

No aguanté más, me quité toda mi ropa y volví a besarla en su boca con pasión. Mi pene grande y duro rozaba los labios de la vagina de mi suegra. "Te deseo mil, métemelo ya por favor!! Necesito que me penetre mi yerno!!" Me dijo. Y sin dudarlo mi pene se enterró en la vagina deliciosa de mi exsuegra. Ambos gritamos simultaneamente. Se apoderó de nosotros un frenesí, mezcla entre placer, morbo y rebeldía a tantas tradiciones y tabus sociales en los que hemos vivido nuestras cuicas vidas. La penetré con toda mi fuerza y velocidad, hasta topar el fondo de su vagina. Estaba todo humedo y lubricado. Nuestro vaivén perfectamente coordinado parecía como si hubiésemos tenido sexo durante años. Luego de algunos minutos exploté dentro de ella, grité, y ella disfrutó un violento orgasmo al sentir mi leche en su interior. Fue impresionante. "Nunca había sentido algo así con mi marido" me dijo. "Es la mejor experiencia sexual que he tenido en mi vida" le dije.

Nos miramos con una mezcla de nervio y vergüenza, pero fue inevitable sonreir y fundirnos en un nuevo beso. Acordamos nunca decirle absolutamente a nadie este suceso y sería nuestro secreto.

Gracias por leer mi historia en este foro
 
cumpliendo con el protocolo
Soy un joven santiaguino bordeando los 30 años. Nací y crecí en una familia tradicional chilena ABC1, religiosa y numerosa, donde el tema sexual fue un verdadero tabú. Fui educado en un colegio particular del sector oriente de Stgo. Muchos amigos y amigas se casaron vírgenes, siempre con gente del mismo círculo social. Sin embargo me declaro anonimamente un hombre muy caliente, lleno de fantasias de las que seguramente muy pocas ocurrirán.

Aqui va una que ocurrió y nunca olvidaré. No escatimé en detalles, así es que si quieres un relato rápido y al grano este no aplica mucho que digamos, jeje...

En el colegio tenía una compañera que siempre me gustó. Yo era tímido y nunca me acerqué a ella. Entramos a la misma universidad y ahí nos reencontramos. No muy convencido comencé con ella una relación. Tremenda fue mi sorpresa cuando conocì a su madre! Rubia natural, ojos claros, se mantenía estupenda a sus cuarenta y tantos. Tenia unas tetas impresionantes. Yo realmente fantaseaba mucho con mi suegra, pero nunca me insinué porque querìa mucho a mi polola y le haría mucho daño si ella descubría que fantaseaba mas con su madre que con ella.

Luego de varios años de pololeo, en los que ambos nos mantuvimos virgenes por convicción moral y religiosa, terminamos la relación. Meses despues, superado el duelo, me encontré de casualidad en el Parque Arauco con mi exsuegra, estaba más MILF que nunca. Se me vino a la cabeza una idea loca: ahora que todo terminó con mi ex, me sentí "libre" para coquetear con mi exsuegra. Nos tomamos un café, conversamos, y algo titubeante dije toda la verdad.

"Eres una mujer muy atractiva. Solia pensar más en tí que en tu hija. Sueño con que me aceptes una invitación fugaz a tomar un trago a mi departamento" le dije. Esperaba una cachetada, o al menos que se despidiera incómoda y se fuera. Pero grande fue mi sorpesa cuando ella me sonrió y me dijo "no soy tonta... obvio que me daba cuenta que me mirabas". "Acepto tu invitación pero sólo un trago, que estoy apurada".

Llegamos a mi departamento. A partir de entonces como que sentí mucha confianza en mi mismo y perdí mi timidez. Ella en cambio se puso nerviosa, tímida. La invité a sentarse en el sillón. Eran aprox las 7pm. Nos servimos un baileys. Conversamos y yo la miraba fijamente. "Tus ojos me vuelven loco" le dije, e inmediatamente se puso nerviosa y sonrió. Me dijo que me echaba de menos en su casa y me abrazó. En ese momento no resistí la tentación y le besé el cuello. Luego le besé la oreja. Ella no opuso ninguna resistencia. "Cierra los ojos" le dije. La besé en la boca. Yo realmente no lo podía creer. Se me estaba cumpliendo un sueño.

Fue un beso apasionado. Con mucha lengua. Humedo. Caliente. "Nunca me habia besado otro hombre que no fuera mi marido.... menos un expololo de mi hija!... Me encanta..." me dijo. Así es, es una mujer felizmente casada que aparenta ser educada y moral, pero esconde una fiera dormida, salvaje y sensual. Y yo la estaba despertando.

Le abrí la blusa que llevaba puesta. Le quité el sostén, sin dejar nunca de besarla. La tumbé boca arriba en mi sillón y comencé a besarle sus tetas deliciosas. La tocaba sin parar. Mi lengua lamía sus pezones. Me devoré sus pechos grandes, dándole pequeños mordiscos en sus pezones hermosos que no tardaron en endurecerse. Comenzó a gemir de placer. Se movía entera.

Bajé con mi boca hasta su ombligo, luego abrí sus jeans y se los quité lentamente. Ella solo se dejaba besar. Tenia frente a mi la vagina mas rica que habia visto en mi vida. Le besé primero sus muslos, luego los alrededores de su vagina. No estaba completamente depilada. Cuando sintió mi cabeza entre sus piernas se volvió loca de placer. Comenzó a gemir mas fuerte, "ahh que ricooo! Sigue no pares!!" repetía una y otra vez. Mi boca se abrió grande y le devoré su vagina rica. Succionaba, mientras mi lengua jugaba con su clitoris. La vagina de mi exsuegra realmente es una delicia. Ella movía con impetu su pelvis. Gritaba y se movia de placer. El morbo de la situación lo hacia increiblemente excitante.

No aguanté más, me quité toda mi ropa y volví a besarla en su boca con pasión. Mi pene grande y duro rozaba los labios de la vagina de mi suegra. "Te deseo mil, métemelo ya por favor!! Necesito que me penetre mi yerno!!" Me dijo. Y sin dudarlo mi pene se enterró en la vagina deliciosa de mi exsuegra. Ambos gritamos simultaneamente. Se apoderó de nosotros un frenesí, mezcla entre placer, morbo y rebeldía a tantas tradiciones y tabus sociales en los que hemos vivido nuestras cuicas vidas. La penetré con toda mi fuerza y velocidad, hasta topar el fondo de su vagina. Estaba todo humedo y lubricado. Nuestro vaivén perfectamente coordinado parecía como si hubiésemos tenido sexo durante años. Luego de algunos minutos exploté dentro de ella, grité, y ella disfrutó un violento orgasmo al sentir mi leche en su interior. Fue impresionante. "Nunca había sentido algo así con mi marido" me dijo. "Es la mejor experiencia sexual que he tenido en mi vida" le dije.

Nos miramos con una mezcla de nervio y vergüenza, pero fue inevitable sonreir y fundirnos en un nuevo beso. Acordamos nunca decirle absolutamente a nadie este suceso y sería nuestro secreto.

Gracias por leer mi historia en este foro
 
mas lo que webean con que portalflayte es cuma y le copian todas las weas,mejor copien los temas de taringa me cago mas de la risa XD
 
Tl_f9a86b_2854617.gif
 
bonita la historia, pero si el weon dijo q era virgen, como describe la vagina de la vieja como "la mas bonita q vio en su vida"
 
Estado
No está abierto para más respuestas.
Volver
Arriba