Cuatro cosas.
Primero que todo, en este tipo de temas se aprecia el poco amor propio que tiene el fachiturro promedio por su gente y país. Se siente por ser moreno de pelo chuzo inferior al resto de habitantes no de Alemania, sino que de Chicureo o Vitacura. Estoy más que seguro que cualquiera de los acéfalos que coinciden con el economista de peluquería, va a Chicureo y cree que los habitantes cagan con olor a rosas, o cree que los alemanes son genéticamente superiores. Repito, cero amor propio.
Segundo, es fácil mostrar una inmigración "trabajadora" cuando lo que llega es lo mejor de lo mejor, o al menos, es decente. Los italianos, croatas, palestinos, alemanes que llegaron al país durante el siglo XIX no eran los ciudadanos más pobres de sus países, ya que de serlo no habrían venido a Chile, habrían terminado en alguna barriada de sus propios países o en algún vecino. Eso, más las facilidades que daba el Estado chileno a la inmigración teutona para colonizar tierras que expropiaron a punta de fusil a los mapuche tras un genocidio hoy celebrado por la derecha, te da la razón. Evidentemente no es lo mismo a lo que pasa con peruanos o colombianos, porque ni de Perú ni de Colombia llega lo más decente de sus países.
Y tercero, el problema de Chile no son los chilenos, el problema de Chile es que su clase dirigente (1% del país), siempre ha sido penca. Nunca fue capaz de crear por su cuenta algo para vender. Todo lo que hacía era comerciar, y su gran competencia siempre fue la clase mercante peruana. De ahí nunca miró a más. Incluso cuando tuvieron la capacidad y oportunidad de competir vis a vis con japoneses o estadounidenses, prefirieron quedarse al nivel de peruanos y competir por una región para luego vender salitre.
Tras todo el siglo XIX hubo diferentes momentos en que Chile pudo haber barrido con ese lastre social, como lo hizo EEUU tras la guerra de secesión, pero tuvimos la mala suerte que EEUU no tuvo. Y es por eso que desde entonces hasta hoy las grandes fortunas basan su negocio en ideas tan innovadoras como jugar en la bolsa, invertir en malls o prestar dinero.
Cuarto, ya es repetitivo que los economistas neoliberales del mundo, al ver que su modelo comienza a hacer agua en todos los países que hasta hace un lustro eran ejemplos (Chile, Kenia, Perú, Colombia, Grecia, ETC), terminan dando una explicación racialista o "cultural" del asunto. Ya pasan de explicaciones técnicas y hablan de lo malo que es la materia prima humana. Divagan en razonamientos cuasi antropológicos para decir por qué todo va mal... pero ojo, cuando iba bien el país con crecimiento y números azules, olvidaban que la misma gente vivía en esos países.
Economistas chantas.