Presente.
La verdad, durante mis casi 22 años de vida tuve "algo" con dos minas.
Conocí a la primera en plena movilización del 2011 en el liceo; al principio fue todo bien, cariñitos por acá y allá, besos, sobajeo y demás weás. Sin embargo, un día me confesó que quería formalizar una relación seria conmigo, lo cual, a mi parecer, me sorprendió bastante, porque yo quería webiar no más, sin ir más allá de eso (pensé en aquel momento que la mina estaba en la misma parada). Le fui sincero, y le dije que no estaba interesado en "pololear". Al final, quedamos como conocidos (ni siquiera hubo amistad), ninguna mala onda. Días después, me enteré por un tercero muy cercano, que fuí patas negras, ya que ella estaba pololeando mientras atracabamos en el liceo. Me cagué de la risa en un principio, pero al rato igual me cuestione un poco, ya que en su momento cualquier weón puede sentirse winner por ser un levantador de minas/rompe hogares, hasta que uno nunca sabe si un día serás tú mismo el que esté en la otra vereda. Filo, rara vez hablo con la minoca hoy en día.
La segunda mina, la conocí apenas llegué a Santiago; todo bien al principio, webeo y webeo, hasta que comienzo a percatarme que andaba más cariñosa de lo normal, mucha preocupación sobre mi bienestar, etc., lo cual me hizo sospechar que esta minoca ya no estaba en mi misma parada de webiar en un principio. Decidí contarle la firme y comenzar a tomar distancia sobre el asunto (no buscar nada serio y pasarla bien no más). Pero, a diferencia de la primera, ésta se tomó muy mal mi postura; me dijo que era un maricón insensible, que nunca le importe más allá que una calentura (lo cual, fue cierto), que era conchesumadre, etc. Pasaron unos meses, si bien no seguía resentida, igual como que a veces quería que yo le hiciera cariño o que la apañara en ciertos momentos, donde me hice el weón y aplique indiferencia. No quería sumar cachos emocionales a mi vida, ni mucho menos cuando mi centro eran/son los estudios.
Desde el último suceso mencionado, han pasado más de 4 años, así que podría considerar que ando más sólo que mojón de carretera con respecto a relaciones sentimentales/amorosas. Empero, con el pasar del tiempo, me siento conforme con mi soledad, ya que de ésta he sacado muchos beneficios de diversa índole personal; quizás, por eso no me agrada la idea de formalizar pololeos y weás por el estilo de momento. Si bien también tengo mi vida social -onda compartir con amigos y familia, ya sea su asado piola, carrete de casa, tomar sus chelas al aire libre, etc- la mayoría del tiempo me agrada estar solo. No me urge ser un poco anti-social, no culiar (me hago una paja y listo, problema resuelto) y/o no tener a nadie con pegarme sus "sobajeos". Si un día llega el momento en que me enamore y tenga compatibilidad con aquella persona, donde pueda plasmar una relación seria, bienvenida sea. Y si no, pico, la vida es corta para malgastar tiempo pensando en weás secundarias (así lo veo yo).
Carpe Diem, giles qls.
verdades
