El problema es que los simios pensaron mal la revuelta, porque asumieron de antemano que quien paga las consecuencias de los saqueos es el presidente de EEUU, pero al parecer ninguno, conocía que son los gobernadores principalmente y los alcaldes los que asumen todas las consecuencias, lo gobernadores por su parte son comandantes en jefe de la guardia nacional en sus propios estados, y hasta el momento se ven solo protestas urbanas, siendo que el votante promedio republicano y pro republicano es sub-urbano y rural, en otras palabras mantener las protestas en estados y zonas urbanas que son bastiones duros demócratas , es una idea bastante weona, de hecho esto puede terminar muy mal para ellos mismos en términos electorales.