Chucha, no tenía idea. Eso que el guatón López creó la Z.
EDITO: Para no mandarme otro posteo.
Respecto al tema, lo primero que me llama la atención es la abundancia de términos gringos este último tiempo, siendo que el español es uno de los idiomas más ricos y variados que se conoce. Algunos ejemplos: las minas tienen más de cinco formas de decir "blanco" y los Cilantritos han bautizado a la herramienta en más de mil formas diferentes.
Ahora al tema de fondo, me parece extraña esa animadversión hacia la gente que trata de ser buena con los demás, independientemente del sexo de los involucrados. Personalmente me considero buen chato, trato de ayudar cuando puedo, no ando por la vida buscando cagar al tipo del lado, busco desarrollarme y ser mejor día a día, asumo los compromisos vayan bien o como el lolly, entre otras más que no detallaré para no aburrir. Lo único importante de señalar es que tampoco busco reciprocidad. Las veces que he estado navegando aguas turbulentas y hasta he naufragado me las he batido solo porque eso está en mi naturaleza. No suelo pedir ayuda ni nada. Tengo claro que las malas experiencias enseñan y las buenas alegran la vida. Si acá cuento algunas situaciones es por la ventaja del anonimato, si estuviera identificado no lo haría ni cagando. Odiar a un weón por ser así es de más weón todavía. Si el weón actúa de esa forma con oscuras intenciones, es weá de él (ya la vida se encargará de castigarlo en su momento) y si lo hace de buena fe, bacán y que le vaya bonito.
El mundo está tan cagado porque justamente todos los weones piensan y velan por sí mismos. No hay espíritu de comunidad ni sentido de pertenencia. Si logro un pequeño provecho a costa de otro weón, bienvenido sea, y no me importa si lo cago más en el camino. Por eso la gran mayoría anda con coraza ante el mundo para no volver a sufrir, sin embargo, el costo de no involucrarse es mucho más nefasto. Esa weá mata el alma.