Cuento corto: hoy tomé el metro cansad@ después de un día largo de la universidad reculiá, cuando después de que una multitud de gente se subiera en una estación común, un grotesco acto interrumpiera mi conversación conmigo mism@: un par de soyeros culiaos, cual película pornográfica, se iban dando un beso AL FRENTE MÍO. Y lo peor es que paraban, conversaban un poco de cuestiones banales supongo (no escuchaba porque andaba con audífonos), y seguían con su transmisión mutua de gérmenes esos hijos de la gran puta. En un punto me aburrí, y los empecé a mirar, con mi profunda, pura, hermosa pero odiosa mirada, para ver si lograba incomodarlos. Y lo logré
. Primero el tipo se cruzó con mi mirada, y luego la mujer. Al principio me ignoraron, pero después no pudieron. Finalmente pararon. No sé que se decían, pero me miraban enojados... bueno, ¿No querían que la gente los viera? Ja. Tras eso se bajaron, y TODOS los pasajeros pudimos continuar nuestro tranquilo viaje sin ese asqueroso espectáculo. Ustedes pensaran que es webeo, pero no podemos tolerar esa inmoralidad; esa falta de respeto hacia el resto. Hay que respetar y hacer respetar la moral pública, estimados antronianos.
En fin. ¿Qué opinan al respecto?, ¿Les ha pasado esto alguna vez?
Eso. Xao