Antes de suicidarte y querer hablar con alguien que te escuche sin emitir juicios, puedes hablarme.
Esperemos que nunca vuelva a revolotear esa misma angustia, de todos modos, si vuelve a pasar, estoy dispuesto a escucharte sin emitir juicios.
Ninguna experiencia negativa debiera ser tan cargada de sentido, que le reste significado a la vida, nosotros somos quienes ponemos valoraciones sobre las experiencias, marcándolas como importantes o para el olvido. De ese modo, hay personas que con mayor grado de resiliencia, consiguen darle un nuevo capítulo a sus vidas y continuar viviendo, porque el acto de vivir tiene posibilidades más menos infinitas a las que dirigirse, y tomar la decisión de terminarla, las coharta, las niega, aún cuando no tengamos la experiencia futura de su certeza, sino la mera promesa. Por eso es que nadie puede decirte que la vida lo vale, si nadie tiene la certeza del futuro, pero tener la certeza de futuro, lo vale.
Soy todo oídos si algún día, decider volver a pensarlo y decides conversar en busca de alguien que no emita juicios.
Los muertos no pueden ser hombres libres, estimado, y se requiere mucha valentía para tener el peso de la angustia existencial y hablar de ello, pero no por ello encontrarás aquí, en este foro del webeo, el lugar para verter esos sentimientos. SIn embargo, estoy dispuesto a escuchar lo que tengas que decir, sin juzgar, decidido a apoyarte en las reflexiones de la vida que estés llevando a cabo en esos momentos de angustia.
Les recuerdo a los peisithanatos (persuasor de la muerte, como Hegesias de Cirene) que sus prácticas son ilegales desde este año. Fuera del ámbito legal, éticamente tengo la obligación de entregarle apoyo a cualquier persona que sufra la angustia del peso insoportable de su existencia. Las experiencias no deberían marcar de tal modo el significado o sentido personal que estemos buscando y penemos que se ha visto truncado, ni nadie debiera emitir juicio sobre éste, pues somos y debiéramos ser los únicos con propiedad que escribamos nuestra propia autobiografía, pues es la propia conciencia la que debiera tener más peso que la opinión del mundo. Sin embargo, la vida no debería tener el mismo peso de la angustia, de pensar que en cualquier momento puedes terminar el sufrimiento de vivirla. Teniendo eso en mente, cualquier dolor parece superfluo, temporal y pasajero.
