niggatzu
Plasta
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Asesinado con un tiro en la cabeza el político cristianodemócrata de Kassel, Walter Lübcke
El disparo fue efectuado a corta distancia con un arma de pequeño calibre cuando Walter Lübcke, de 65 años, se encontraba en su jardín
Sus familiares encontraron el cadáver en la terraza de la casa, pasada la media noche del domingo. El cuerpo, tendido sobre un charco de sangre, presentaba un disparo en la cabeza a la altura de la oreja derecha. Tanto sus familiares como los sanitarios que acudieron a la llamada de urgencia procedieron a varios intentos de reanimación sin éxito. «La investigación indica que fue un disparo a corta distancia y el arma no ha sido por ahora encontrada», ha explicado el fiscal Horst Streiff, encargado del misterioso caso de asesinato del presidente del gobierno de Kassel, el popular político cristianodemócrata (CDU) Walter Lübcke.
Tras no hallar indicios de que se trate de un suicidio o un disparo accidental efectuado por la propia víctima, ya que la autopsia no ha hallado restos de pólvora o de humo en las manos y brazos del fallecido, la Oficina de Investigación Criminal (LKA) del estado federado de Hesse y la Fiscalía parten de la hipótesis de que fue víctima de un asesinato, aunque carecen de pistas que apunten hacia un autor concreto o que permitan sacar conclusiones de los posibles motivos del supuesto crimen. El disparo fue efectuado con un arma de pequeño calibre cuando Lübcke, de 65 años, se encontraba en su jardín, en la parte delantera de la casa, tras lo cual la víctima se arrastró probablemente todavía unos metros hasta la terraza.
La policía ha desplegado cientos de efectivos por la zona en busca del arma, con la esperanza de encontrar en ella huellas dactilares o restos de ADN que permitan dar con el autor del disparo. Además ha publicado un llamamiento a la población pidiendo pistas que permitas esclarecer lo ocurrido. El fiscal considera que por el momento no hay indicios que permitan relacionar el asesinato con las amenazas de muerte recibidas anteriormente por el político, debido a su postura abierta hacia la acogida de refugiados.
Protección policial las 24 horas
Lübcke nació en Bad Wildungen. Se doctoró en Economía y trabajó para la Dokumenta antes de entrar en política. El 21 de mayo, celebró su décimo aniversario de servicio como presidente de distrito. En octubre de 2015 causó un gran revuelo cuando se expresó su apoyo a un nuevo hogar para refugiados en una reunión en la ciudad de Hesse, frente a 800 oyentes entre los que figuraba un grupo de seguidores del grupo antiextranjeros Kagida. Allí mismo fue increpado por parte del público, que le acusaba de «vender los intereses de Alemania», y posteriormente recibió numerosas amenazas de muerte. Como consecuencia y durante periodos prolongados de tiempo desde esa fecha, Lübcke se vio obligado a llevar protección policial las veinticuatro horas del día.
La escena del crimen parece haber sido ligeramente modificada y en ella ha sido encontrada al menos una colilla. No está claro si Lübcke fumó un cigarrillo o estaba junto a un invitado en ese momento. En todo caso, tal y como el fiscal ha reconocido en la rueda de prensa ofrecida esta mañana en Kassel, quien disparó es posiblemente una persona conocida y de al menos cierta confianza, dada la posición de cercanía desde la que apretó el gatillo sin que Lübcke tratase de huir.
https://doctrinanacionalsocialista.blogspot.com/2019/06/ejecutan-de-un-balazo-en-la-cabeza-al.html
El disparo fue efectuado a corta distancia con un arma de pequeño calibre cuando Walter Lübcke, de 65 años, se encontraba en su jardín
Sus familiares encontraron el cadáver en la terraza de la casa, pasada la media noche del domingo. El cuerpo, tendido sobre un charco de sangre, presentaba un disparo en la cabeza a la altura de la oreja derecha. Tanto sus familiares como los sanitarios que acudieron a la llamada de urgencia procedieron a varios intentos de reanimación sin éxito. «La investigación indica que fue un disparo a corta distancia y el arma no ha sido por ahora encontrada», ha explicado el fiscal Horst Streiff, encargado del misterioso caso de asesinato del presidente del gobierno de Kassel, el popular político cristianodemócrata (CDU) Walter Lübcke.
Tras no hallar indicios de que se trate de un suicidio o un disparo accidental efectuado por la propia víctima, ya que la autopsia no ha hallado restos de pólvora o de humo en las manos y brazos del fallecido, la Oficina de Investigación Criminal (LKA) del estado federado de Hesse y la Fiscalía parten de la hipótesis de que fue víctima de un asesinato, aunque carecen de pistas que apunten hacia un autor concreto o que permitan sacar conclusiones de los posibles motivos del supuesto crimen. El disparo fue efectuado con un arma de pequeño calibre cuando Lübcke, de 65 años, se encontraba en su jardín, en la parte delantera de la casa, tras lo cual la víctima se arrastró probablemente todavía unos metros hasta la terraza.
La policía ha desplegado cientos de efectivos por la zona en busca del arma, con la esperanza de encontrar en ella huellas dactilares o restos de ADN que permitan dar con el autor del disparo. Además ha publicado un llamamiento a la población pidiendo pistas que permitas esclarecer lo ocurrido. El fiscal considera que por el momento no hay indicios que permitan relacionar el asesinato con las amenazas de muerte recibidas anteriormente por el político, debido a su postura abierta hacia la acogida de refugiados.
Protección policial las 24 horas
Lübcke nació en Bad Wildungen. Se doctoró en Economía y trabajó para la Dokumenta antes de entrar en política. El 21 de mayo, celebró su décimo aniversario de servicio como presidente de distrito. En octubre de 2015 causó un gran revuelo cuando se expresó su apoyo a un nuevo hogar para refugiados en una reunión en la ciudad de Hesse, frente a 800 oyentes entre los que figuraba un grupo de seguidores del grupo antiextranjeros Kagida. Allí mismo fue increpado por parte del público, que le acusaba de «vender los intereses de Alemania», y posteriormente recibió numerosas amenazas de muerte. Como consecuencia y durante periodos prolongados de tiempo desde esa fecha, Lübcke se vio obligado a llevar protección policial las veinticuatro horas del día.
La escena del crimen parece haber sido ligeramente modificada y en ella ha sido encontrada al menos una colilla. No está claro si Lübcke fumó un cigarrillo o estaba junto a un invitado en ese momento. En todo caso, tal y como el fiscal ha reconocido en la rueda de prensa ofrecida esta mañana en Kassel, quien disparó es posiblemente una persona conocida y de al menos cierta confianza, dada la posición de cercanía desde la que apretó el gatillo sin que Lübcke tratase de huir.
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