Finrod_Felagund
Huevon sin Vida
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Amina Hart, una australiana de 42 años, acudió a un banco de esperma para quedarse embarazada y una vez nació su hija decidió buscar a su donante de semen, del cual acabó enamorándose.
La australiana ya había tenido dos hijos con anterioridad, pero los dos fallecieron a los pocos meses de vida "a causa de un desorden genético", según ella misma declaró al Daily Mail. Sin embargo, Amina no se desanimó y decidió probar por tercera vez a quedarse embarazada. Aunque tenía un 75% de probabilidades de que el bebé naciese también enfermo la suerte ha estado de su lado y la pequeña Leila, que ahora tiene dos años, nació completamente sana.
A la hora de elegir el donante de semen a Amina le entregaron tres posibles perfiles. Ella escogió el de Scott Andersen, un hombre que se consideraba "feliz y tranquilo" y que ya tenía cuatro hijos que habían nacido totalmente sanos.
Poco después del nacimiento de Leila Amina decidió que su hija tenía derecho a conocer a su padre, por ello contactó con la clínica que la inseminó para que la pusiesen en contacto con Scott.
Amina, Scott y Leila empezaron a quedar y conforme las visitas se hacían más frecuentes entre Amina y Scott empezó a surgir un sentimiento que iba más allá del simple cariño. Ambos comenzaron a enamorarse y después de unos meses decidieron comenzar una relación estable. Ahora Amina, Leila, Scott y sus hijos han formado una bonita familia.
http://www.elcomercio.es/sociedad/201411/06/australiana-enamora-donante-semen-20141106173242.html
La australiana ya había tenido dos hijos con anterioridad, pero los dos fallecieron a los pocos meses de vida "a causa de un desorden genético", según ella misma declaró al Daily Mail. Sin embargo, Amina no se desanimó y decidió probar por tercera vez a quedarse embarazada. Aunque tenía un 75% de probabilidades de que el bebé naciese también enfermo la suerte ha estado de su lado y la pequeña Leila, que ahora tiene dos años, nació completamente sana.
A la hora de elegir el donante de semen a Amina le entregaron tres posibles perfiles. Ella escogió el de Scott Andersen, un hombre que se consideraba "feliz y tranquilo" y que ya tenía cuatro hijos que habían nacido totalmente sanos.
Poco después del nacimiento de Leila Amina decidió que su hija tenía derecho a conocer a su padre, por ello contactó con la clínica que la inseminó para que la pusiesen en contacto con Scott.
Amina, Scott y Leila empezaron a quedar y conforme las visitas se hacían más frecuentes entre Amina y Scott empezó a surgir un sentimiento que iba más allá del simple cariño. Ambos comenzaron a enamorarse y después de unos meses decidieron comenzar una relación estable. Ahora Amina, Leila, Scott y sus hijos han formado una bonita familia.
http://www.elcomercio.es/sociedad/201411/06/australiana-enamora-donante-semen-20141106173242.html