El problema no es el crédito en sí, ni las tarjetas, sino la educación financiera,
y el entrenamiento mental para soportar las tentaciones de satisfacción inmediata,
y por sobre todo, la usura.
En Chile, como consecuencia del modelo neoliberal y de los desajustes heredados de la dictadura cívico-militar y su mal llamado “milagro económico”, la precariedad es el pan de cada día de la mayoría de los chilenos.
Una de las pocas ayudas con las que cuenta el trabajador con poca capacidad adquisitiva es “el crédito”, un mecanismo utilizado de forma transversal que, gracias a una alianza mercado-Estado, le permite acceso a bienes o servicios.[...]
Eso de Pin8 fue cuando los de la Fundación Ford creían que enseñarle a sudacas una docrina filosófica (que creó a los "ingenieros" comerciales) para sacar a América Latina de su nefastez. Por eso fueron a Chicago a capacitarse todos esos políticos e hijos de familias influyentes (los eligieron a dedo).
De todos los países que capacitaron, el que resultó fue Chile porque los endogámicos de acá no se robaron toda las inversiones, como sí pasó en los otros países.
Ahora la Fundación Ford apuesta por los progres y el socialismo. Por eso que en Chicago crearon la carrera política de Obama, y les han estado financiando la cueca a todos esos enfermos con pelo rojo y de colores, y caras gritonas, importación de "refugiados" y otras estupideces.
¿Hasta cuándo van a estar pegados con lo de Pin8?
Ah, ojo sí.
Los intereses de las tarjetas no pagan impuesto, por eso hacen todas esas promos y piden que pagues con tarjeta.
Incluso hay muchos que meten todo el sueldo a la cuenta de la tarjeta y pagan con ella todo.
Sin Pin8 estaríamos como Cuba.
Un mal menor.
Tanto que joden con las políticas de Pin8, y han pasado todos estos años y la dictadura de la Concerta aún no las cambia.
Porque gracias a ellas viven en sus barrios burgueses como en USA