Deadwood

Western, género que potenciara John Ford (Stagecoach, The Searchers, The Man Who Shot Liberty Valance), reformulara Sergio Leone (Per Qualche Dollaro In Più, Il Buono, Il Brutto, Il Cattivo, C'era Una Volta Il West) y sepultara Clint Eastwood (The Outlaw Josey Wales, Pale Rider, Unforgiven), dejó varios conceptos como la paternidad, la acción bélica, los personajes solitarios, que fueron derivando en todos los demás géneros cinematográficos hasta el día de hoy. Deadwood hace un giro en las estandarizaciones hechas por el western, obviando casi todos sus conceptos (sobre todo las populares balaceras), y enfocándose en los personajes y sus propósitos. Un western sin acción bélica, sin relaciones paternales y donde los personajes solitarios mueren (muchos por decisión propia), termina asesinando al género perteneciente, pero ¿es Deadwood el peor western de la historia?

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Deadwood es hoy una ciudad del estado de Dakota, que en sus inicios fue habitada por indios y en 1876 (donde transcurre la serie) es poblada por personajes históricos como Wild Bill Hickok (Keith Carradine), Calamity Jane (Robin Weigert), Charlie Utter (Dayton Callie), Seth Bullock (Timothy Olyphant), Sol Star (John Hawkes), etc. David Milch (creador de la serie) introduce la ficción justa para cada personajes, creando un leguaje único, actual, y con personajes centrados en la estrategia, más que en las balas.

Como en casi todas las series de HBO, Deadwood no tiene un protagonista claro. El más carismático por paliza es Al Swearengen (Ian McShane, ganador del Globo de Oro por esta serie), un temperamental dueño de un bar/burdel/casino, descendiente de ingleses y quien controla el pueblo. Swearengen se atormenta con la llegada de estos tipos que vienen a alterar su status quo, sobre todo Seth Bullock y Bill Hickok, responsables principales de los enojos del enérgico Swearengen, quien junto a su séquito soluciona los problemas a los que se ve afectado, ya sea con silenciosos cuchillos o estafas baratas.

Su segundo ciclo se basa en las negociaciones para que Deadwood se Anexe al estado de Dakota, donde destacan Cy Tolliver (Powers Boothe) y su prostituta protegida Joanie Stubbs (Kim Dickens), junto con la inclusión del representante del poderoso George Hearst, Francis Wolcott (Garret Dillahunt). Esta segunda temporada guarda a Swearengen durante varios capítulos, para hacerlo despertar como un hombre más calmo y sumamente reflexivo (soliloquios incluidos), que delega todos sus trabajos sucios a su brazo derecho Dan (W. Earl Brown), expulsa al envidioso E.B. Farnum (William Sanderson) y forma un equipo para enfrentarse a la inminente llegada de George Hearst.

Hearst (Gerald McRaney) es un empresario minero que llega al campamento para apoderarse de las minas del pueblo (y así controlarlo), asesina a sus trabajadores con tendencias sindicales y comienza una guerra contra Deadwood. Con el telégrafo como medio de comunicación ya consagrado y la llegada de una compañía teatral al campamento de la mano de Jack Langrishe (un a tono Brian Cox), distraen y animan a la población mientras Hearst amenaza destruir el pueblo con pistoleros.

La serie fue cancelada luego de su tercera temporada, y quedaría realmente sin un desenlace y cierre para sus personajes. Costos de producción, el abultado sueldo del reparto y como siempre el rating, fueron los responsables del termino de esta joya de la televisión. Carnivàle fue cancelada un año antes que Deadwood por similares razones, y ambas son recordadas como los grandes puntos negros que empañan la excelencia de HBO.

Deadwood Cast​

Carnivàle Cast​

David Milch, un verdadero "gurú" hoy en día para los guionistas, crea este leguaje único característico de la serie que viene a reinventar ese western lleno de ignorancia, donde la sapiencia sólo se tiene para desenfundar un arma, junto a una nula verborrea y sentido de la estrategia. Deadwood revive un género donde lo más destacable en la última época ha sido ese remake de True Grit (2010) de los hermanos Coen, y que espera vivir su verdadera ® evolución en Django Unchained (2012) de Tarantino, que por su estilo, involuntariamente tendrá mucho de Deadwood.

El año pasado Ralph Fiennes debutó como director, adaptando la obra de Shakespeare, Coriolanus. La gracia fue recrear esta historia romana del siglo XVII en la actualidad, con vestuario, edificios y armas contemporáneas. El resultado fue llamativo, pero con dispares críticas para este atrevimiento del actor británico, que con un excelente reparto (donde destaca Brian Cox) saco la tarea adelante. A Deadwood se le ha calificado en numerosas ocasiones como “Shakesperiana”. Series como Sons Of Anarchy han reconocido la influencia del dramaturgo inglés, pero al comparar Deadwood con Coriolanus, se nota una diferencia abismal entre una adaptación/copia/influencia de Shakespeare, y una obra 100% original. La serie es Milch en su máxima expresión, una genialidad.

Coriolanus (2011)​

Sons Of Anarchy (2006)​

Deadwood se atrevió a ridiculizar un género fundamental para la historia del cine, en el que pocos se atreven a juzgar sus basicos sentidos y donde el Western crepuscular (impulsado por Sam peckinpah) quiza se salva de esta denominacion.La creación de todo un nuevo estilo leguaje, con obviamente grandes diálogos, peleas (sólo a combos) y un humor negro y sexualidad presente en toda la factoría HBO, proclaman que no es necesaria la demasía de pirotecnia para realizar un gran western (y claramente la serie no tiene un discurso antibélico). La serie es un material único, bastante literario a ratos, pero que con su visualidad gris y pantanosa, logra la fusión perfecta entre el cine y la literatura, incluso para que no sea necesario un final.

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