¿La mayoría de sus archivos fueron desclasificados?, claro que sí, pero no si hablamos de los "archivos secretos"... los archivos secretos desclasificados por parte de Rusia han sido MUY pocos. Las desclasificaciones de archivos secretos que existen de la URSS son en su mayoría extra-oficiales (como por ejemplo el archivo Mitrojin, y ese mismo archivo señala como Allende prácticamente era un agente soviético y de como le proporcionaba datos de inteligencia a la URSS) o provienen de parte de otras naciones que eran de la orbita soviética (como de Ucrania que se ha encargado de revelar todo el tema de Holdomor).
Y el apoyo, financiamiento y colaboración de la URSS no fue menor , en este link están las pruebas:
http://www.archivochile.com/Izquierda_chilena/pc/sobre/ICHpcsobre0003.pdf
Claro campeón. Se desclasificó en Rusia todo lo respectivo a las ejecuciones, presos políticos y espionaje, y no se iba a desclasificar lo respectivo a la ayuda de un país como Chile.
Es que Putin temía las reacciones de Piñera y Hermógenes Pérez, hombre, ¡pos va ser que no!
Luego, leyendo tu link lo que se ve es algo que no es sorpresa para nadie, el aporte de la URSS a los diferentes partidos políticos del mundo. Siendo el partido comunista uno de los que recibe el aporte más minoritario.
Hombre, ¿no te cansas de hacer el ridículo?
Con respecto al apoyo real, los datos son claros.
Cuando Allende estaba siendo electo, Nixon y la CIA creían que Allende crearía una suerte de Chile comunista al más puro estilo de la Europa oriental. Y que Moscú daría un millón de dólares a la campaña. Realmente el apoyo fue de 400.000 dólares. Mucho menor tanto a otros países como a lo que el mismo Estados Unidos destinaba a la DC. Ya que la CIA tan solo entre 1963 y 1970 gastó más de 13 millones de dólares.
Sin embargo, un mes después de la elección presidencial, el senador comunista Volodia Teiltelboim informó al embajador de la URSS en Chile que la hija de Allende, Beatriz, había conversado con Castro quien recomendaba que la política de Chile no debía dar pasos revolucionarios y que no debía cambiar de rumbo de manera que no generara un ambiente político hostil.
Es más, la CIA en su National Security Memorandum 87 estimaba que la elección de Allende;
1) No amenazaba los intereses vitales de Estados Unidos dentro de Chile, a pesar de algunas pérdidas económicas significativas.
2) No alteraba significativamente el equilibrio militar.
3) Sin embargo la victoria de Allende tenía significativos costos políticos pues amenazaba el equilibrio de la región, del hemisferio y de la OEA.
Por otro lado Moscú nunca tuvo mucho interés en el proyecto socialista chileno. Ya que éste estaba fuera de su órbita, y Cuba le estaba costando muy caro. El mismo Carlos Altamirano que había estado 2 veces con Brezhnev, había advertido que Moscú no estaba en condiciones de ayudar a Chile.
Allende fue varias veces a negociar un préstamo con la URSS, buscaba 500 millones de dólares.
Andre Gromiko afirma que la URSS sí estuvo dispuesta a conceder tal ayuda. Sin embargo Ricardo Lagos designado en la embajada chilena en la URSS afirmó que el dirigente soviético fue muy evasivo y que la situación fue muy compleja, por tanto no aseguraba mucho.
Finalmente la ayuda concedida fue bastante menor, solo 100 millones de dólares como máximo, afirmando entonces Salvador Allende estar muy decepcionado.
Brezhnev en sus dos ocasiones en las que se reunió con Altamirano afirmó que Chile era un país muy distante y que temía que en Chile sucediera lo mismo que en Egipto con Al Anwar Sadat, que es lo que en efecto terminó sucediendo.
La razón es que la URSS no estaba interesada en intensificar su lucha con los Estados Unidos en aquel momento y lugar porque su objetivo estaba materializándose en otro lugar, lo que buscaba la URSS era lograr con Estados Unidos, Francia y Gran Bretaña era firmar el transivertrag. Quería mayor diálogo también con occidente dada su crisis con China.
En conclusión, la URSS jamás hizo en Chile, porque no quería ni podía, lo que Estados Unidos.
Ni mimó a las FF.AA.
Ni mimó a la UP.
Ni mimó al MIR.
