"No disparen a la alegría": La curiosa campaña del Gobierno turco ante el inédito título del Trabzonspor en la liga local
Finalmente el Trabzonspor ganó su primera liga en 38 años en un partido de infarto pero, desde que se contempló la posibilidad de que alcanzaran el titulo, el Gobierno turco implementó una curiosa campaña para impedir "disparos de festejo" en una ciudad conocida por su amor a las armas.
El Trabzonspor se ha proclamado hoy ganador de la Superliga turca al empatar en casa a dos goles al Antalya y sumar un punto que hacen matemáticamente imposible que el
Fenerbahce, su rival más cercano, le supere en las tres jornadas que restan por jugarse.
El título liguero logrado este sábado es el primero del club de Trabzon, una ciudad turca costera en el Mar Negro,
desde la temporada 1983-1984.
El equipo local tuvo que sufrir para llevarse el título, en un tenso encuentro en que los jugadores llegaron a las manos en alguna ocasión y el público invadió el terreno antes incluso del pitido final, pensando erróneamente que el encuentro ya había acabado.
El partido fue una montaña rusa, en la que el Trabzonspor terminó la primera parte ganando por uno a cero, una ventaja que se transformó en empate nada más comenzar la segunda mitad.
Los locales se adelantaron de nuevo en el minuto 62, pero el Antalya logró el 2 a 2 a sólo 10 minutos del final, alargando la agonía del finalmente campeón ligero.
Esta es la séptima liga del club, lo que le coloca como el cuarto con más títulos de Turquía, por detrás del Fenerbahçe, Galatasaray y Besiktas.
Y como era de esperarse la proclamación de campeón fue recibida con entusiasmo por las decenas de miles de personas que se congregaron para seguir el partido a través de pantallas gigantes colocadas en plazas de toda la ciudad, desde donde se lanzaron fuegos artificiales.
En antelación al ansiado titulo hace días que la ciudad ya estaba decorada con los colores azulgrana del equipo y preparada para una gran fiesta, pero había un factor que separaba las aguas entre este y cualquier otro festejo deportivo.
Las autoridades turcas, desde que se contempló la posibilidad de que el Trabzonspor ganara la liga, tuvieron que verse enfrentadas al riesgo asociado a un evento de esta magnitud en una ciudad cuya población tiene un desconcertante y más que reconocido "amor" por las armas,
llegando al nivel de tener la costumbre de celebrar con disparos al aire.
Ante este temor, el Gobierno turco y el club iniciaron hace una semana la campaña
"No disparen a la alegría" para evitar los disparos durante los festejos.
Las balas locas, y la caída de los proyectiles en espacios con grandes aglomeraciones de personas presentaba el caldo de cultivo perfecto para lamentar heridos y fallecidos, por lo que se ha intentado hasta el momento apaciguar a los entusiastas tanto de las armas como del Trabzonspor.
Finalmente el Trabzonspor ganó su primera liga en 38 años en un partido de infarto pero, desde que se contempló la posibilidad de que alcanz
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