La izquierda dura está con viento a favor. La insurrección de octubre fue para derrocar a Piñera, por eso el PC no participó del pacto por la "paz". No están ni ahí con que haya paz mientras gobierne la derecha o la centro izquierda. El proceso constituyente era otra fase de su plan, eso iba a ocurrir cuando llegaran al poder. Y como estos weones no son precisamente democráticos, iban a imponer una nueva constitución (lo intentaron hacer madame Bachelet) sin someterla a plebiscito, con su asamblea constituyente de mierda.
Piñera apostó por una salida política e institucional. Como la chiva del modelo se instaló, dijo perfecto, la forma de cambiarlo es con la constitución. Ahora, si la nueva constitución se aprueba y queda algo mediamente razonable, es decir, lejos del chavismo, la izquierda de dura se muere políticamente. Ya no le quedarían chivas para destruir este país... porque recuerden, la izquierda dura existe porque existió Pinochet, es la razón de ser de estos weones.
Lo preocupante es que los más sensatos se están izquierdizando, y los más extremistas se están imponiendo por la violencia sin que nadie les plante cara (institucionalmente).
Así están las cosas de acuerdo al último plebiscito. Hay que ver cómo las próximas elecciones cambian o mantienen el escenario.