Por un tema de avance como sociedad y que es necesario dejar las cosas del pasado en el pasado, desde los tiempos de Lagos que me parecía necesario un cambio de constitución. Mientras nuestra base fuera la Constitución del 80 siempre un grupúsculo de wns iba a webiar por más que la hayan reformado. Sin embargo aunque no me parecía mala idea que se cambiara la constitución finalmente voté rechazo porque no podía avalar que me metieran un plebiscito a la fuerza nacido en un contexto de violencia.
Sabiendo que era un saludo a la bandera igual voté por la opción perdedora y si fui a votar para ese plebiscito sabiendo que perdería por goleada más voy a ir a votar ahora en donde creo que es posible que los ultras sean minorías. La izquierda con sus 168 mil 768 listas y 3878 millones de candidatos se está dando un balazo en las piernas por lo que esta oportunidad hay que aprovecharla. La elección de abril es "la elección de las elecciones" y ahora más que nunca no podemos claudicar.
Tiene que volver la mesura a este país, es necesario el diálogo y la negociación, hecho que nunca ocurrirá si la ultra izquierda arrasa en estas elecciones.