Ser periodista es empeñar la verdad a nombre de intereses creados; ergo, no pueden pensar críticamente y sólo se yerguen como relacionadores públicos y/o 'aplaudidores a sueldo' de élites ajenas.
Cualquier persona, con una debida formación en determinada disciplina, puede desempeñarse en los mismos oficios de un periodista; así por ejemplo, un abogado o cientista político, podrá comentar o escribir sobre política o actualidad internacional, como el médico o enfermero - por caso - sobre áreas de salud o ciencias.
No es casualidad que en muchos países, el periodismo no sea más que una tecnicatura; siendo carrera profesional en Estados Unidos (Universidad de Columbia) Chile y - marginalmente - Argentina (donde la U. de Buenos Aires, ofrece 'Ciencias de la Comunicación', mas asociada a una mixtura entre 'periodismo' y 'relaciones públicas'; a tiempo que en otras instituciones, no es más que un oficio técnico) Esto último, aplíquese a los profesores, cuya disciplina puede estudiarse en institutos o como tecnicatura media en colegios ('profesorado')
Finalmente, valga consignar que los periodistas fueron profesionales frustrados (si es que dicho término, les resulta 'digno') que no tuvieron cabeza para estudiar una carrera de verdad; con mayor complejidad, capacidad de análisis y elaboración argumentativa, y sólo se obnubilaron ante las luces del espectáculo, los vicios de la televisión y audiovisuales (sin saber que el periodista puede trabajar en diversos ámbitos) y el excitante placer de viajar y/o vestirse 'con plata de otros' (en programas de reportajes o viajes a destinos foráneos)