Los placeres violentos tienen un violento final
Absorto en su relato (papiro), que llega en forma providencial mientras espero mi turno en una reparticion pública ( hay como 100 weones antes de mi CTM !) Me pregunto lo siguiente:
Si usted nunca consideró los eventuales pros y contras de unirse carnalmente ante la veleidosa ninfa anfibia
¿ Por qué preocuparse ahora?
Veo en sus actitudes a una persona que no se deja restringir por el yugo de la razón, y a juzgar por su erotizado relato, mal no lo ha pasado cipadrito
Le recomiendo no preocuparse tanto, y que acepte que las cosas sean lo que deben ser, verá que no vale la pena hacerse problema, y pronto será el protagonista de otra obra, en otros escenario...la vida es una dramaturga maravillosa
Algo me dice que en su futuro los roles cambiarán y la ninfa será usted, en la cana, deleitándose con los placeres homoeróticos, inspirados por años de encierro, entre puros
onvres de febril lascividad.
Sus desenfrenos carnales seguirán teniendo receptiva respuesta y conocerá nuevas sensaciones, como todo un ciudadano de la Grecia clásica, o un gladiador de la Roma antigua ...
Pero si eso no le hace mucha gracia hermanito, le pregunto :
¿ Es fácil probar un delito si la principal evidencia desaparece ?
Ahí la dejo
Espero conocer el desenlance tan pronto como sea posible, y no está demás reiterar que siempre es un agrado leer su virtuosa pluma (no deje que los envidiosos lo desanimen)
Salu3