Patéticos.
Soy ateo pero nunca he caído en ese tipo de provocaciones contra aquellos religiosos por el mero hecho de sentirme en un pedestal de superioridad como lo hacen la mayoría de estos personajes.
Por ejemplo, jamás podría hacer eso con algún creyente de avanzada edad y llenarlo de dudas existenciales (con todo lo ello significa y puede desencadenar) y potencialmente destruirle su vida, sólo por generar una situación narcisista en la que me pueda reír a costa de esa persona y sentirme "realizado".
Se trata de tener un mínimo de empatía, madurez y altura de miras.