ingenierodelmonton
Plasta
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Colombia ya es el productor de pornografía infantil más grande de Latinoamérica
Así lo dice el Ministerio de Comunicaciones, que solo en el 2014 bloqueó más de 400 páginas con contenido de este tipo, el doble del 2013.
Pese a los esfuerzos de esta cartera, se estima que unas 4.100 siguen funcionando, señala El Espectador. “El consumo en el mundo ha aumentado y en Colombia varias personas han apostado por abastecer este cruel comercio. Las capturas en los últimos tres años casi se han triplicado y la Internet está atestada de videos sexuales de niños de todas las edades. Muchos de ellos, colombianos”, añade el diario.
“Es un tema demasiado serio, sensitivo, porque como hemos mencionado, las víctimas en este caso son niños que no saben en qué los están utilizando”, explica Álvaro Zabaleta, uno de los detectives de la Dirección de Delitos Sexuales de la Policía de Miami, a Séptimo Día.
Se trata de un negocio fácil, reitera el programa. Solo se necesita un computador de buena capacidad, cámaras y micrófonos que se adquieren sin problema, un datáfono, listas de chat y, lo más importante, niños.
El negocio ha crecido al punto de que el país ha tenido que recibir la colaboración de la policía de otros lugares del mundo, especialmente de Estados Unidos, en la captura de consumidores y productores de estos contenidos. Sin embargo, la tarea no ha sido fácil, advierte el programa. En 4 años, solo 2300 niños han sido protegidos de la explotación infantil.
Los testimonios son descarnados. “Hacíamos lo que pidieran los usuarios… pagaban por medio de tokens. Por ejemplo, dele un beso y damos 200 tokens. Tocaba esperar a que primero pagaran y ahí sí uno hacía lo que le dijeran”, cuenta uno de los menores a El Espectador. El token es una moneda digital equivalente a un dólar, que el cliente paga para que los menores hagan su ‘show’ frente a la cámara.
Desde luego, no estaban solos. Tras bambalinas están los dueños del negocio, que pagan y dan las instrucciones a los menores. “¿Cuántos usuarios podían tener conectados durante una escena? Todos los días entre 4 y 5 mil usuarios desde Rusia, Norteamérica y hasta países asiáticos. El negocio funciona así: las escenas sexuales con niños se graban con una cámara casera y luego se enlazan con alguna de las 5.000 páginas de sexo en vivo que actualmente se encuentran en la red”, explica Séptimo Día.
“Es un delito que sabemos que está produciendo muchas ganancias, es el tercer delito que más produce dinero en el mundo”, explica al programa Angie Salazar, subdirectora de la Agencia de seguridad ICE, brazo de la Embajada de los Estados Unidos en la lucha contra la pornografía infantil en Colombia.
Así lo dice el Ministerio de Comunicaciones, que solo en el 2014 bloqueó más de 400 páginas con contenido de este tipo, el doble del 2013.
Pese a los esfuerzos de esta cartera, se estima que unas 4.100 siguen funcionando, señala El Espectador. “El consumo en el mundo ha aumentado y en Colombia varias personas han apostado por abastecer este cruel comercio. Las capturas en los últimos tres años casi se han triplicado y la Internet está atestada de videos sexuales de niños de todas las edades. Muchos de ellos, colombianos”, añade el diario.
“Es un tema demasiado serio, sensitivo, porque como hemos mencionado, las víctimas en este caso son niños que no saben en qué los están utilizando”, explica Álvaro Zabaleta, uno de los detectives de la Dirección de Delitos Sexuales de la Policía de Miami, a Séptimo Día.
Se trata de un negocio fácil, reitera el programa. Solo se necesita un computador de buena capacidad, cámaras y micrófonos que se adquieren sin problema, un datáfono, listas de chat y, lo más importante, niños.
El negocio ha crecido al punto de que el país ha tenido que recibir la colaboración de la policía de otros lugares del mundo, especialmente de Estados Unidos, en la captura de consumidores y productores de estos contenidos. Sin embargo, la tarea no ha sido fácil, advierte el programa. En 4 años, solo 2300 niños han sido protegidos de la explotación infantil.
Los testimonios son descarnados. “Hacíamos lo que pidieran los usuarios… pagaban por medio de tokens. Por ejemplo, dele un beso y damos 200 tokens. Tocaba esperar a que primero pagaran y ahí sí uno hacía lo que le dijeran”, cuenta uno de los menores a El Espectador. El token es una moneda digital equivalente a un dólar, que el cliente paga para que los menores hagan su ‘show’ frente a la cámara.
Desde luego, no estaban solos. Tras bambalinas están los dueños del negocio, que pagan y dan las instrucciones a los menores. “¿Cuántos usuarios podían tener conectados durante una escena? Todos los días entre 4 y 5 mil usuarios desde Rusia, Norteamérica y hasta países asiáticos. El negocio funciona así: las escenas sexuales con niños se graban con una cámara casera y luego se enlazan con alguna de las 5.000 páginas de sexo en vivo que actualmente se encuentran en la red”, explica Séptimo Día.
“Es un delito que sabemos que está produciendo muchas ganancias, es el tercer delito que más produce dinero en el mundo”, explica al programa Angie Salazar, subdirectora de la Agencia de seguridad ICE, brazo de la Embajada de los Estados Unidos en la lucha contra la pornografía infantil en Colombia.
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Luzbeldark
el pibe valderrama
