Que "en las viñas del Señor hay de todo" es un hecho ya indesmentible, aunque todavía cuesta que sea aceptado de buenas a primeras.
Es lo que ocurre con tres jóvenes carabineros que, según ellos aseguran, fueron obligados a firmar la baja de la institución policial tras haber reconocido su homosexualidad.
Dos de ellos, Víctor Rivas y Armando Salgado, dieron la cara y contaron su drama anoche, en el noticiario central de ChileVisión.
Confirmando que son pololos desde hace ya un buen tiempo, los jóvenes afirmaron que fueron discriminados, por lo que recurrirán a la justicia para conseguir ser reintegrados al servicio.
WENA NATY
En la contraparte, la Dirección de Comunicaciones Sociales de Carabineros dijo en un comunicado que los ex funcionarios presentaron sus renuncias voluntariamente "por tener mejores perspectivas en el ámbito civil".
Fuentes allegadas al caso señalaron al diario pop que un incidente al interior de la Tenencia Santa Adriana desató la decisión de los jóvenes.
Ese mismo mes de mayo, afirmaron, Rivas estuvo una noche de guardia en la unidad tras haber sostenido una discusión con su pololo. En ese contexto el joven le habría hecho insinuaciones sexuales a otro colega, onda un ¡Wena Naty!, lo que fue rechazado por el poli, quien luego de insultarlo y golpearlo, lo denunció al jefe de la unidad.
Al ser encarado por el superior, Rivas reconoció su homosexualidad, dio el nombre de su pareja y de un tercer poli de la misma opción sexual. Los tres se fueron de baja.
MOVILH
Rolando Jiménez, presidente del Movimiento de Liberación Homosexual (Movilh), calificó la situación de "gravísima discriminación" y anunció que pedirá una audiencia con la subsecretaria de Carabineros y que hoy denunciará el caso ante la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara de Diputados.
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