El actor nacional radicado en México fue el más reciente invitado en el espacio "Dos en la ciudad" de The Clinic conducido con Iván Guerrero. En la conversación, contó qué lo llevó a tomar la decisión de emigrar a Norte América, lo complejo que fue encontrar papeles,
situación que lo llevó a tomar clases para lograr el acento mexicano. Además, compartió cómo ve al Chile actual a la distancia.
Brasil o México eran los destinos a los que apuntó
Tiago Correa para internacionalizar su carrera y dejar la industria audiovisual chilena. El actor nacional, tras participar en “Dueños del Paraíso”, ficción escrita por Pablo Illanes y que fue una coproducción entre TVN y Telemundo.
En conversación con Iván Guerrero en el espacio
“Dos en la ciudad” de The Clinic, Tiago Correa contó fue el actor mexicano José María “Chema” Torre, quien le dijo que debía irse a Norte América. “Él me dio una lucecita”, dijo.
En un principio, antes de la llegada del streaming, “reconoció que no pensaba mucho en salir a trabajar fuera de Chile”, pero con el tiempo empezó a entender que
la industria de la televisión “iba en picada”. Fue entonces en que probó viajando varias veces tanto a México y a Brasil, para “cachar la onda” y “si me gustaba la ciudad”.
Finalmente, dos factores jugaron en su decisión de radicarse en Ciudad de México:
se enamoró de la capital mexicana y lo cerrado que era el mercado brasileño.
Vendió un terreno en Peñalolén, que le dio el dinero para sobrevivir su primer año en Norte América. “Fue rehacer todo, partir todo de nuevo, pero con un currículum”, recordó.
“Lo que más me impresionó es que la industria es industria”, afirmó.
Llegar a México y aprender el acento
Durante su conversación con Iván Guerrero, Thiago Correa no escondió su acento mexicano, algo que debió trabajar con un coach para lograr optar a castings y ganarse papeles.
“Los primeros seis meses fueron agotador. Entender los códigos. Las trampas del slang”, explicó.
A eso se sumó a la dificultad de encontrar mánager. Tras seis fallidos intentos, una mujer lo tomó.
Fue ella quien le dijo que no sacaba nada con audiocionar sino trabajaba el acento. Se metió a clases. “Iba cuatro clases a la semana a trabajar con un coach”, contó. Sesiones que se mantuvieron por seis meses.
Para lograrlo, también se aisló de sus amistades chilenas y les avisó a sus familiares que les iba a hablar en mexicano. Su gran prueba fue bajarse de un taxi y que no le preguntarán de dónde era.
Justo cuando lo logró, tuvo la posibilidad de hacer un casting para el rol protagónico de una película indie llamada “Malibú”. Esta película lo ayudó para dar el gran salto, ya que
con confianza hizo el casting para “La Reina del Sur”, una serie que “lo más impactante es que realmente la ve todo el mundo”. A través de Telemundo, logró ingresar al mercado latino de EEUU y México. Fue su papel en “La Casa de las Flores” el que le dio más visibilidad con la industria del país donde se radicó.
Pese a que hoy día, Tiago Correa no se ve volviendo a Chile, sigue atento a lo que ocurre con el país. El actor nacional reconoció que “me dolió muchísimo el Rechazo, me partió el corazón y fue un momento en que tuve que tomar cierta distancia de Chile”.
“No lo desconocí (a Chile), pero sentía que habíamos perdido una gran oportunidad de hacer un cambió brutal”, expuso, para luego contar que ve a la distancia que el país necesita un cambio contundente para lograr mejora la calidad de vida.
Además, compartió su visión actual de Chile:
“Veo a un país súper estresado, veo un país súper polarizado, veo un país con un odio constante. Eso me duele, pero también entendiendo a Chile como un lugar que es mi raíz, pero yo hoy por hoy voy a vivir siempre en México en primera instancia”.
Tiago Correa conversó con el espacio "Dos en la ciudad" de The Clinic sobre su carrera en México y su mirada a la distancia de Chile.
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