Peor aún. Una persona ebria es fácilmente dominable, más aún si hay mejor condición física por parte del sobrio y, ciertamente, mayor control, reflejos, conciencia, etc. Fácilmente pudo seguir evadiendo y retirarse, y aún si lo golpeara, dudo que una persona en esas condiciones fuera a infligir un daño importante. A la violencia no le faltan excusas: le sirve cualquiera. La violencia parece ser la vía fácil y rápida, pero eso es finalmente cobardía ante el camino largo que requiere un valor y un esfuerzo adicional. Representar al bien en este mundo es el camino más difícil, pero el que trae mejores frutos a futuro. La violencia, que parece funcionar al instante, siembra a futuro toda clase de desgracias, y a la hora de cosechar todos esos frutos podridos el hombre no sólo se queja y victimiza sino que además apunta bien lejos de sí mismo las culpas, que hay "otros" más culpables.
Si quieren cambiar el mundo, de estas pequeñas decisiones frente a un conflicto, de las respuestas positivas a todas esas dificultades individuales, está el germen del cambio que florecerá en la masa.y finalmente en toda la humanidad.