Creo que todos hemos tenido alguna aventura con una mina no muy agraciada que después tratamos de negar por culpa del maldito licor...
La mia fue en mis tiempos de Universitario, en mis vacaciones de Verano en La Serena me invitaron unos amigos ir a la Fiesta Papayera (creo que así se llamaba), que hacía la ULS. La hicieron esa vez (2003 aprox) en un a cancha de futbol de tierra y la wea era como una pampilla, grande con varios sectores, varios "locales" de copete y comida y más gente que la chucha. Fuimos un grupo de como 10 personas, entre amigos y amigas de mis amigos (todos de la ULS)... Había una mina media regalona de la olla que me miraba con hambre, pero como yo estaba sobrio y apuntaba a otros objetivos, no la pescaba mucho... Hasta que me curé como piojo y caí en sus redes y terminamos empelotandonos en el sillón de su casa (vivía con unas compañeras) como a las 5 de la mañana (todo lo transcurrido entre las 2 y las 5 fue borrado de mi memoria)... Lo único que me acuerdo es que le estaba chupando las tetas (el único punto fuerte de la mina) y después desperté sólo en el sillón como a las 7 am cagao de frío... Así que procedí tomar mis cosas en silencio y salir antes de toparme con alguien en esa casa...
Suma pa la resta, perdí un polerón y por fortuna sólo mi hermano chico me cachó en la fiesta atracando con la gordi, pero no pasó a mayores (por fortuna en ese tiempo no había tanta cámara como ahora)... y obviamente nunca más vi a la mina.
Saludos.