En la agricultura es un sector donde esta bastante generalizado el problema con los inmigrantes, en Requinoa (zona centro) y ahora en el sur donde encontraron a los haitianos trabajando como esclavos, hay que poner atención en ese sector.
Respecto a lo que resalte, hay que tener en cuenta lo siguiente, el porque esto no esta beneficiando ni va a beneficiar a los trabajadores colombianos:
El trabajo como la fuente cierta de ingresos para tener calidad de vida y ofrecer oportunidades a las personas y a las familias se realiza con salarios y garantías laborales suficientes. Esto no sucede en Colombia; para el 2014 se encontró que alrededor de la mitad de los trabajadores colombianos son pobres. Las cifras revelaron que el 48,6% (10.450.000) de las personas con ingresos laborales obtuvieron un salario mínimo o menos cada mes, o sea que se encontraban en condiciones de pobreza.
Pero eso no es lo peor, según el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE) este porcentaje subió más de 10 puntos entre 2013 y 2014, ya que en 2013 era el 38,4%, es decir, los ingresos de los colombianos disminuyeron en el último año a pesar de la prosperidad o la paulatina disminución del desempleo. Las estadísticas por sexo revelaron que para el último año las mujeres recibieron en promedio 20,2% menos que el ingreso que recibieron los hombres, evidenciando la brecha que existe entre unas y otros en materia salarial. Analizando los ingresos de hombres y mujeres por rangos de salarios mínimos se encontró que de cada 100 mujeres, 53,4 recibió un salario mínimo o menos cada mes, mientras que de cada 100 hombres, 45,3 recibió más de un salario mínimo. Además se encontró que de las mujeres el 30,2% se concentró en el rango salarial de 0 a medio salario mínimo mensual legal vigente (SMMLV), mientras que del total de los hombres, el 27,0% se ubicó en el rango de más de medio a un SMMLV. En los últimos años el salario mínimo real no ha presentado variaciones destacadas, sólo en 2009 y 2012 donde los incrementos fueron de 5,6% y 3,3% respectivamente; para los demás años las variaciones han sido marginales. En 2008 el salario mínimo real fue de USD 234,6 para el 2014 se ubicó en USD 260,6.2 Por otro lado, analizando la masa salarial como porcentaje del PIB3 se encontró que ésta no ha presentado cambios significativos en el país.
Para el 2005 el 32,1% del PIB correspondía a las remuneraciones de los trabajadores; cinco años más tarde aumentó en 0,6 pp, ubicándose en 32,7%, para permanecer invariable en 2013. Lo anterior está evidenciando como el crecimiento económico no ha beneficiado de manera significativa a los trabajadores, al parecer la mayoría de la riqueza producida en el país ha sido capturada por la ganancia del capital, esto es los empleadores. Los resultados anteriores son muestra de la inequidad laboral, una de las principales razones por las que Colombia sigue siendo uno de los países más desiguales de la región, sin variaciones significativas como se mostró.
Mucho de lo anterior se debe en primero lugar a que la sindicalismo en Colombia representa dos dificultades, la primera es que cuesta establecer un sindicato debido a la excesiva flexibilidad laboral, y la segunda, es por que una vez que constituye un sindicato, si los miembros de estos piden mucho, simplemente se les elimina, el empresario colombiano simplemente no le interesa estar dentro de la ley.
"En este contexto restrictivo de las libertades sindicales y de esfuerzos de las organizaciones por crecer y aumentar la sindicalización se mantiene la violencia antisindical. El Sistema de Información en Derechos Humanos (Sinderh) de la ENS ha registrado que en Colombia, desde el 1 de enero de 1977 hasta 2014 han sido asesinados, al menos 3.066 sindicalistas. Entre las víctimas 2.785 eran hombres y 283 eran mujeres. Más grave aún fue que 864 de estos casos, es decir el 28,2%, quienes perdieron la vida ejercían la dirigencia sindical."
"Además, de acuerdo al registro histórico se encontró que desde el año 1977 se han cometido, al menos, 13.831 violaciones a la vida, libertad e integridad contra las y los sindicalistas en el país. Entre éstas, 350 atentados con o sin lesiones, 234 desapariciones forzadas, 6.660 amenazas de muerte y 1.889 desplazamientos forzados. En 2014 se presentaron 380 casos de violaciones a la vida, libertad e integridad cometidas contra sindicalistas en el país: al menos 23 homicidios, 238 amenazas, 77 hechos de hostigamientos, 17 detenciones arbitrarias y 23 atentados de muerte, entre otras violaciones que siguen extendiendo la lista de agresiones contra las y los sindicalistas. Por sexo se encontró que 52 casos fueron dirigidos a las mujeres y 328 a los hombres."
http://www.redlat.net/site/wp-content/uploads/2016/04/colombia-trabajo_decente-sintesis.pdf
Y a todo lo anterior hay que sumar:
Nueve de cada diez asesinatos en Colombia quedan impunes
Estadísticas muestran que solo el 20 por ciento de los casos llegan a ser judicializados.
http://www.eltiempo.com/politica/justicia/impunidad-en-colombia/16115768
Simplemente negocio redondo para matar sindicalistas y evitar el poder sindical.