El Eurogrupo rechaza una extensión del programa de rescate como había pedido Grecia
El presidente del Eurogrupo cree que la decisión de convocar un consulta es "muy triste"
"La decisión hará daño a Europa", ha advertido Varoufakis, que ha dejado ya la reunión
Grecia acusa de a Dijsselbloem de no permitir al ministro seguir en las discusiones
Dijsselbloem dice que el referéndum griego cierra una puerta que estaba abierta
El presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, ha explicado en una comparecencia ante los medios a las 17.25 que los ministros de Finanzas de la Eurozona han rechazado la petición griega de extender el programa de rescate más allá del 30 de junio.
"El programa expirará el martes por la noche", ha resumido el holandés. Reflejo del fracaso absoluto de las negociaciones tras más de cinco meses de duro trabajo e infinitos encuentros. Y advertencia de los enormes riesgos que se abren ahora.
"Las autoridades de la Eurozona están listas para hacer todo lo que sea necesario para asegurar la estabilidad financiera de la zona euro", han avisado. Unas palabras duras, inquietantes y que no anticipan un escenario positivo en las próximas horas, días y semanas.
En una situación muy poco frecuente, el Eurogrupo ha entrado en pausa tras el debate sobre la prórroga, y su presidente ha organizado una rueda de prensa, entre fuertes rumores. Dijsselbloem ha explicado que 18 ministros han consensuado una declaración. Y que Grecia no ha querido firmarla. La pelota queda ahora, según las Instituciones, en el tejado del Parlamento griego, al que ha invitado a pensarse dos veces si aprobar la petición de referéndum.
Minutos después, el ministro de Finanzas griego, Yanis Varufakis, tranquilo y sonriente, ha dado su versión. "Expliqué a mis colegas por qué no podíamos aceptar la propuesta de las instituciones. Por tres razones. Las llamadas 'Prior Actions' son recesivas y redistributivas, pero redistribuyendo la carga de quienes pueden soportarla hacia quienes no. La segunda razón, financiera, es que la propuesta que estaba en la mesa era técnicamente inadecuada. Los números no cuadraban. La tercera, los cinco meses propuestos, que deberían ser para superar la crisis, exigían una revisión tras otra cada semana sin nada que mostrase que no estaríamos en la misma situación de nuevo.
Varoufakis explicó que su Gobierno tiene el mandato de su pueblo y les recordó que han sido elegidos "para momentos como éste". "El mínimo necesario es el 50% +1, y no tenemos más del 36% de los votos".
Ruptura de las negociaciones
La declaración de los 18 ministros explica que "por desgracia, a pesar de los esfuerzos a todos los niveles y el total apoyo del Eurogrupo, las propuestas han sido rechazadas por las autoridades griegas, que rompieron las negociaciones de forma unilateral el 26 de junio por la noche".
Por eso, el comunicado sigue, "El Eurogrupo toma nota de la decisión del Gobierno griego de convocar un referéndum el 5 de julio, después de que el programa expire el 30 de junio". Y recuerda que "el 30 de junio expiran también todos los acuerdos vinculados al programa, como las transferencias de los Estados Miembros por los SMP y el ANFA [que son los beneficios por las operaciones con bonos nacionales del BCE].
Una clara advertencia de la pérdida de acceso a la liquidez que tanto necesita el país.
La reunión del Eurogrupo seguirá ahora, sin la delegación helena, pero con un tema de discusión mucho más preocupante: las consecuencias de este rechazo y el llamado "Plan B", lo que puede ocurrir, en Grecia y en Europa, a partir de ahora.
Varoufakis no estará en en esa reunión. Tras la rueda de prensa ha recogido sus cosas y acompañado de su delegación ha dejado el edificio del Consejo y se encamina de vuelta a Atenas. Su portavoz ha indicado que la decisión de "excluir a Varoufakis del resto de reuniones ha sido de Dijsselbloem y no del resto de socios europeos".
Los escenarios son muy diferentes, pero se hablará de un posible impago soberano, de controles de capitales y de "consecuencias" aún peores.
"No hay mecanismos para la salida del Euro, Los hay desde el Tratado de Lisboa para la salida de la UE, pero no del euro", ha destacado Varufakis, descartando cualquier posibilidad de que su país se vea abocado a salir del euro. Un escenario muy desfavorable que podría llegar a producirse si el programa expira, hay un impago y control de capitales en los bancos helenos.
En las próximas horas o días, el BCE tendrá que tomar una decisión sobre la línea de liquidez de emergencia (ELA, en sus siglas en inglés) que está manteniendo viables a los bancos griegos. El Banco Central Europeo puede mover ficha tras la constatación de que el acuerdo es prácticamente imposible, y eso podría tener consecuencias inmediatas y muy grandes sobre el sistema financiero griego. "Hablo con pesar sobre esos riesgos, pero están ahí. Ahora el Parlamento griego debe considerar en qué punto estamos".
En un comunicado enviado esta misma tarde, el organismo que preside Mario Draghi ha anunciado que su Comité Ejecutivo tendrá un encuentro para discutir la situación. El BCE está siguiendo de cerca el desarrollo de los acontecimientos".
"Grecia ha respondido negativamente, ha rechazado las propuestas y la opinión de los otros 18, es que lo lamentamos", ha lamentado el presidente del Eurogrupo, que añadió que, ante esa situación, "hoy no son posibles ya más negociaciones o conversaciones".
Dijsselbloem espera que el parlamento no respalde a Tsipras. Igual que Varoufakis ha comentado que si las instituciones hubieran hecho una propuesta más razonable él, el Gobierno heleno hubiera cambiado de parecer y habría hecho campaña a favor del "Sí" el próximo 5 de julio.
Preguntado sobre qué es exactamente lo que van a votar los griegos el día 5, si no hay propuestas, Dijsselbloem ha desviado hacia el Este la respuesta: "esa cuestión es para las autoridades griegas, no para mí".
Profundo malestar
La reunión de los ministros de Finanzas de la zona euro arrancó este sábado en Bruselas con mal ambiente, profundo malestar y muy pocas expectativas. Por quinta vez en menos de 10 días, los titulares de Economía y Finanzas abordarán el tema griego, pero con un punto de partida totalmente diferente tras la decisión, anoche, del primer ministro heleno, Alexis Tsipras, de convocar un referéndum el próximo 5 de julio para votar sobre el acuerdo con las instituciones.
Hasta ayer, el objetivo de la reunión era discutir sobre la base de la última propuesta griega y la última de las instituciones. Ahora parece tener muy poco sentido, pues Tsipras ha movido ya ficha.
"Estoy muy negativamente sorprendido por la decisión del Gobierno griego. Parece que han rechazado la última propuesta y sobre esa base negativa ha convocado un referéndum recomendando el 'no' a los griegos. Es una triste decisión para Grecia que cierra la puerta a más conversaciones cuando estaba abierta. Escucharemos al ministro griego y hablaremos de las consecuencias", ha explicado el presidente del Eurogrupo, el holandés Jeroen Dijsselbloem, visiblemente molesto.
"Se complican las cosas, se han complicado. Es muy difícil continuar negociando en estas circunstancias. Hoy pretendíamos hacerlo. Las consecuencias de un referéndum es que se rompen las negociaciones", ha coincidido esta mañana el español Luis de Guindos, quien ha advertido: "Cada vez estamos más cerca de que el Plan B se convierta en el Plan A", un mensaje durísimo que ha secundado el ministro finlandés.
"El Plan B se está convirtiendo en el Plan A", además de avisar de que "hay un claro consenso de que una extensión del programa está fuera de lugar", añadió Alex Stubb.
Posibles escenarios
Se abren así para la reunión algunos escenarios:
- Las instituciones retiran la propuesta, todas las propuestas, para presionar a Atenas
- Negocian un poco más para que lo que salga de hoy sea lo que se vote el 5 de julio
- Las instituciones se asustan y aceptan la última propuesta griega
- Llegan a un acuerdo
- Solo negocian la extensión de la prórroga que ha pedido Tsipras
- Ignoran la petición de prórroga y ni se molestan en considerarla
- Sólo hablan de un 'Plan B', asumiendo que habrá impagos y control de capitales
Pero la mayoría de los conciliadoras parecen menos probables, por no decir imposibles, tras escuchar a los ministros europeos. Yanis Varoufakis ha optado por no hacer declaraciones a su llegada.
El secretario de Estado de Finanzas de Holanda, Erik Wiebes, ha sido muy claro: "No veo razones para una extensión del programa. La posición es muy clara y la fecha límite se conoce desde hace meses".
"El referéndum es una opción democrática de los gobiernos, lo que es muy desafortunado es el timing, el momento", ha coincidido Edward Scicluna, ministro maltés
El programa de rescate acaba el 30 de junio. Y si no hay acuerdo finaliza, con lo que Grecia pierde el acceso a los 7.200 millones de euros que tiene pendientes de cobrar. Además, el 30 de junio expira el plazo para que Atenas devuelva al FMI cerca de 1.560 millones de euros.
"Ha sido un movimiento extraño y contradictorio", ha lamentado el ministro de Finanzas belga, Johan Van Overtveldt sobre el referéndum. La directora gerente del FMI, Christine Lagarde,, por su parte, ha asegurado que "las instituciones siempre hemos mostrado flexibilidad ante la situación económica del país. El objetivo de lo que hacemos es devolver la estabilidad a la economía griega, su independencia financiera, como pasó en Irlanda o Portugal, y eso seguiremos haciendo. Par ello hace falta un equilibrio. De un lado reformas estructurales, profundas, para cambiar la economía, hacerla más productiva. Pero también consolidación fiscal, que lleva al crecimiento. Del otro lado, ayuda financiera por parte de los socios europeos. Hemos trabajado sobre esas líneas y seguiremos haciéndolo y trabajando", ha afirmado.
http://www.elmundo.es/economia/2015/06/27/558e938246163f92178b456f.html
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