masterofhell316
Plasta Culiad@
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Ya si tampoco es algo asi tan impactante XD pero es curioso que de la extrema izquierda tambien a empezado su critica ,el problema es que esto se presta para aumentar mas el boicot panfletero inquisidor en vez de ayudar a la causa . Tratan a claude de humanizar el capitalismo,o sea si algunos ven a Parisi como un capitalista progresista,aca van mas allá y meten a claude también por el hecho de seguir sosteniendo las mismas estructuras. Aun así es un analisis interesante para ver otros puntos de vista y comprender que puede ser beneficioso pero también nocivo en esta clase de pensamientos. El trotskismo toma esa vision de que los cambios graduales democraticos no sirven y blabla... bueno leanlo uds y saquen sus conclusiones.
La política pasó a las calles. Hay un rechazo creciente a la herencia de la dictadura y sus guardianes de la derecha y la Concertación, que el movimiento estudiantil de manera creciente desde el 2011, con sus luchas, expresó, amplificó, dio forma, mostró que puede ser impugnada abriendo el camino a su fin. El 2012, se expresó con la amplia abstención del 60% en las elecciones municipales. El 2013 se empiezan a sumar a ese rechazo los trabajadores de sectores centrales y estratégicos, como vimos con los paros de los forestales, mineros, portuarios. La lucha de clases está extendiéndose, ampliándose, intensificándose.
Este 2013 también se expresa, de otro modo, ante las elecciones presidenciales y parlamentarias: contra las candidaturas de la derecha y la Concertación, otras muchas han aparecido: MEO y el PRO, Franco Parisi, Tomás Jocelyn-Holt, el Partido Igualdad con Roxana Miranda, el Movimiento por una Asamblea Constituyente con Gustavo Ruz, y Marcel Claude con el Partido Humanista y una plataforma de grupos, partidos, movimientos ciudadanos y ambientalistas, entre ellos: MAIZ, sectores del partido Ecologista, sectores del MAS, la Izquierda Ciudadana, Movimiento Libres del Sur. Apoyan además algunas organizaciones sindicales como la Confederación Bancaria.
Esta última candidatura, la de Marcel Claude, está atrayendo la atención de estudiantes, trabajadores, profesionales, y crecientemente de los medios de comunicación. En Valparaíso, una reunión prevista en una Universidad, para 200 personas, concluyó con una especie de concentración en la Plaza Sotomayor con 2000 personas.
El 2009 el hastío con la Concertación –que concentraba el legado de la dictadura maquillado- se expresó en el voto del recambio gubernamental hacia la derecha. Ahora, y nacido de la lucha de clases, y de un régimen impávido que está así cavando su propia tumba, un ánimo a izquierda se va extendiendo. Una a una, las herencias de la dictadura van siendo cuestionadas: la educación de mercado, la privatización del agua, la precarización del trabajo, la discriminación contra la Diversidad Sexual, la intocabilidad de curas abusadores, el saqueo del cobre y el consecuente empobrecimiento de las regiones, el centralismo, la Constitución del ’80, el sistema de AFPs, los abusos de los bancos, la represión policial. Los empresarios están alarmados, José Manuel Camposano, presidente de los aseguradores y de Chilena Consolidada, lo expresó: “Hoy todo está en discusión. Se cuestiona el modelo de generación de riqueza. Abundan conceptos como ‘redistribución de ingresos’, ‘derechos’ y ‘gratuidad’. Mitos ilógicos empiezan a conquistar espacio entre los chilenos: el libre mercado se hace sinónimo de lucro; la competencia sinónimo de falta de solidaridad; la creación de riqueza para fundar empresas es sinónimo de monopolio; la infraestructura del comercio, léase los malls, son alienación consumista; el uso de recursos para el bienestar humano, es depredación”.
Ese ánimo general a izquierda, es lo que la candidatura de Marcel Claude parece estar aunando. ¿Cómo se explica? ¿Es una expresión genuina de esta impugnación generalizada, es decir, capaz de terminar efectivamente con toda la herencia pinochetista puesta en cuestión? ¿O es expresión de esta fase de la lucha de clases? Una respuesta marxista, exige un análisis de clase.
¿Propuestas de cambios revolucionarios?
“El paso del poder de una clase a otra, es la primera, principal y básica característica de una revolución”
Lenin, Cartas sobre táctica
La única auténtica “democracia económica” es la que suprime la propiedad privada de los medios de producción.
Por eso, es que no hay base material para una “democracia real”.
El anti- neoliberalismo de la “democracia real” es capitalismo humanizado
“La ‘democracia pura’ es la frase mentirosa de un liberal que trata de engañar a los obreros. La historia conoce la democracia burguesa, que reemplaza al feudalismo, y la democracia proletaria, que reemplaza a la democracia burguesa”
Lenin, “La revolución proletaria y el renegado Kautsky”
Como vimos, y como corolario de todo esto, Marcel Claude quiere que “nuestro país sea un lugar democrático, justo y participativo”. Que no esté regido por “el capitalismo salvaje”.
Quiere atenuar sus contradicciones. Ir así a un capitalismo humanizado. Con empresas nacionalizadas del cobre junto a inversiones extranjeras reguladas. Con sistema solidario de pensiones, a la vez que sistemas privados. Etc.
Texto completo:
http://www.ptr.cl/nacional/lucha-de...e-una-democracia-radical-que-no-va-a-la-raiz/
La política pasó a las calles. Hay un rechazo creciente a la herencia de la dictadura y sus guardianes de la derecha y la Concertación, que el movimiento estudiantil de manera creciente desde el 2011, con sus luchas, expresó, amplificó, dio forma, mostró que puede ser impugnada abriendo el camino a su fin. El 2012, se expresó con la amplia abstención del 60% en las elecciones municipales. El 2013 se empiezan a sumar a ese rechazo los trabajadores de sectores centrales y estratégicos, como vimos con los paros de los forestales, mineros, portuarios. La lucha de clases está extendiéndose, ampliándose, intensificándose.
Este 2013 también se expresa, de otro modo, ante las elecciones presidenciales y parlamentarias: contra las candidaturas de la derecha y la Concertación, otras muchas han aparecido: MEO y el PRO, Franco Parisi, Tomás Jocelyn-Holt, el Partido Igualdad con Roxana Miranda, el Movimiento por una Asamblea Constituyente con Gustavo Ruz, y Marcel Claude con el Partido Humanista y una plataforma de grupos, partidos, movimientos ciudadanos y ambientalistas, entre ellos: MAIZ, sectores del partido Ecologista, sectores del MAS, la Izquierda Ciudadana, Movimiento Libres del Sur. Apoyan además algunas organizaciones sindicales como la Confederación Bancaria.
Esta última candidatura, la de Marcel Claude, está atrayendo la atención de estudiantes, trabajadores, profesionales, y crecientemente de los medios de comunicación. En Valparaíso, una reunión prevista en una Universidad, para 200 personas, concluyó con una especie de concentración en la Plaza Sotomayor con 2000 personas.
El 2009 el hastío con la Concertación –que concentraba el legado de la dictadura maquillado- se expresó en el voto del recambio gubernamental hacia la derecha. Ahora, y nacido de la lucha de clases, y de un régimen impávido que está así cavando su propia tumba, un ánimo a izquierda se va extendiendo. Una a una, las herencias de la dictadura van siendo cuestionadas: la educación de mercado, la privatización del agua, la precarización del trabajo, la discriminación contra la Diversidad Sexual, la intocabilidad de curas abusadores, el saqueo del cobre y el consecuente empobrecimiento de las regiones, el centralismo, la Constitución del ’80, el sistema de AFPs, los abusos de los bancos, la represión policial. Los empresarios están alarmados, José Manuel Camposano, presidente de los aseguradores y de Chilena Consolidada, lo expresó: “Hoy todo está en discusión. Se cuestiona el modelo de generación de riqueza. Abundan conceptos como ‘redistribución de ingresos’, ‘derechos’ y ‘gratuidad’. Mitos ilógicos empiezan a conquistar espacio entre los chilenos: el libre mercado se hace sinónimo de lucro; la competencia sinónimo de falta de solidaridad; la creación de riqueza para fundar empresas es sinónimo de monopolio; la infraestructura del comercio, léase los malls, son alienación consumista; el uso de recursos para el bienestar humano, es depredación”.
Ese ánimo general a izquierda, es lo que la candidatura de Marcel Claude parece estar aunando. ¿Cómo se explica? ¿Es una expresión genuina de esta impugnación generalizada, es decir, capaz de terminar efectivamente con toda la herencia pinochetista puesta en cuestión? ¿O es expresión de esta fase de la lucha de clases? Una respuesta marxista, exige un análisis de clase.
¿Propuestas de cambios revolucionarios?
“El paso del poder de una clase a otra, es la primera, principal y básica característica de una revolución”
Lenin, Cartas sobre táctica
La única auténtica “democracia económica” es la que suprime la propiedad privada de los medios de producción.
Por eso, es que no hay base material para una “democracia real”.
El anti- neoliberalismo de la “democracia real” es capitalismo humanizado
“La ‘democracia pura’ es la frase mentirosa de un liberal que trata de engañar a los obreros. La historia conoce la democracia burguesa, que reemplaza al feudalismo, y la democracia proletaria, que reemplaza a la democracia burguesa”
Lenin, “La revolución proletaria y el renegado Kautsky”
Como vimos, y como corolario de todo esto, Marcel Claude quiere que “nuestro país sea un lugar democrático, justo y participativo”. Que no esté regido por “el capitalismo salvaje”.
Quiere atenuar sus contradicciones. Ir así a un capitalismo humanizado. Con empresas nacionalizadas del cobre junto a inversiones extranjeras reguladas. Con sistema solidario de pensiones, a la vez que sistemas privados. Etc.
Texto completo:
http://www.ptr.cl/nacional/lucha-de...e-una-democracia-radical-que-no-va-a-la-raiz/