Bueno, con respeto te digo que estás equivocado. La República no es la manga de hijos de puta que desde la época de la colonia han concentrado el poder entre sus primos. La República, cuya manifestación fáctica es el Estado, somos todos los ciudadanos, los que pagamos impuestos y votamos para elegir representantes entre las opciones caca y pichí.
No me gusta ver a la República desestabilizada como ha estado estos días, al contrario, sólo quiero orden. Por lo mismo estoy en contra de las fuerzas internacionales que, con ayuda de grupos chilenos sediciosos, han golpeado a base de terrorismo y miedo a nuestro país sólo para causar miedo. Pero sí estoy con el ciudadano de a pie que sale a manifestarse de forma pacífica. ¿Eso me hace traidor?, si lo piensas así, bien por tí.
Pero te digo esto: creer que el descontento social surgió de la noche a la mañana por un grupúsculo de agentes chavistas infiltrados en el país es faltarle el respeto a la gente. A tu madre, a tu padre, a tu tía y vecina. Creer que la gente que ha salido a lo largo del país a demostrar día a día su descontento es estúpida o weona (como lo hace la Tere Marinovic, que trata de aweonaos a los que salen a protestar) no nos llevará a nada, sólo a la división y eso es hacerle el juego a la izquierda, porque la gente no nos prestará atención si la tratamos de imbécil. Hay que entender al adversario para vencerlo.
Es fácil guardarse en la casa y elegir la información selectivamente para que nuestro cerebro la procese, dejando de lado lo otro. ¿Sabes a lo que lleva ese pensamiento?, a la instauración de regímenes totalitarios, como la URSS o el 3° Reich, o mejor aún, la Romanía de Ceaușescu, en que mataban a todo el que pensaba distinto a ellos hasta que la gente se aburrió y los mató a ellos mismos en un dos por tres.
La libertad de pensamiento y de expresión, dentro de un marco de orden y de respeto al tercero, es lo que hay que defender para que los marxistas leninistas no nos ganen la partida. Si no estás de acuerdo conmigo, conforme. Si creer que soy traidor a una supuesta causa totalitaria de derecha, conforme, no hay nada que te pueda decir para hacerte cambiar de opinión. Pero te digo, creo representar los mismos valores que tú y otros. Si mi estrategia te violenta estás en todo tu derecho, por favor explícanos la tuya y si es más eficaz, seré el primero en abrazarla.