La crisis de los últimos días, no sólo demuestra el fracaso de la clase política - y de los partidos - en oír o responder a los intereses de las personas; mas tampoco se debe olvidar la desidia de la gente en no ir a votar, o no participar en la medida que la Democracia requiere.
Se espera que la Democracia resuelva los conflictos y brinde soluciones 'para todo', sin tomar en cuenta que las grandes transformaciones y/o reformas necesitan de recursos; de dinero, impuestos, recaudación (pues el dinero no cae del cielo). Sólo en la afiebrada utopía roja, las reformas se concretan con plata infinita.
En resumen, las protestas y caceroladas del último tiempo, no son más que el lloriqueo milénico de quienes buscan medidas cortoplacistas, manipulados por el populismo comunacho y Fraude Amplio.
apaleen a ese weon
ctm la hice de oro
Son demasiado altibajos para una semana.
piyeta
por weon
