Es un fenómeno mundial. Europa se está dando cuenta de que el mal llamado "progresismo" es un cáncer tan rancio y tóxico como el marxismo. De hecho, es gracias a ese progresismo que han salido posiciones nacionalistas, conservadoras y de derecha más potentes y con mejores bases. Es cosa de echarle una pequeña mirada países como Polonia y Hungría que han mandado a la chucha las cuotas migrantes de la UE. Por otro lado el Brexit (al fin despertaron los ingleses, a la mala, pero despertaron), así mismo los Austriacos y los Alemanes que poco a poco comienzan a afianzar posiciones más conservadoras repeliendo el "progresismo".
Hay que considerar además que el catolicismo se está revitalizando y está influyendo mucho también en Europa como moviento político.
Eso repercute directamente en América. Mientras pocos países giran al socialismo/progresismo, el resto lo hace hacia una derecha más conservadora, véase el caso de Trump y Bolsonaro. Con eso en mente, no sería tan lejano a la realidad un posible triunfo presidencial de Kast, al menos, en segunda vuelta. La izquierda y el progresismo no tienen candidatos potentes. ¿Jadue? ¿Berta Sánchez?
Es tan rancio ver negras culiás con esos afros culiaos indecentes, feminazis culiás llenas de tatuajes y cortes de hombre. Ahora la mano está justamente en buscarse minitas huasas del interior que no pescan esas imbecilidades y tener una familia como Dios manda. No una cagá interracial con orangutanes caribeños practicantes de vudú con parásitos intestinales, hepatitis y ETS.