LA HISTORIA DEL CUADRO MÁS ATACADO EN RUSIA
IVAN EL TERRIBLE Y SU HIJO (1885).
Autor: Ilía Repin (1844-1930).
Género: Histórico-Movimiento realista ruso.
Técnica: Óleo sobre lienzo (200 cm x 254 cm).
Ubicación: Galeria Tretyakov, Moscú, Rusia.
Como si fuera una maldición que la persigue desde que el autor la plasmara ¿Qué tiene esta pintura que desde que fue expuesta ha sido atacado hasta en dos oportunidades?
Una de las obras con mayor contenido psicológico de la historia del arte, pintado por Ilía Repin del movimiento realista ruso, y el pintor más famoso de finales del siglo XIX, ha guardado una carga psicológica y analítica desde su creación. Antes de terminar el cuadro en 1885, el mismo Repin, refiriéndose a su cuadro dijo: “Pintaba por ratos, sufría, estaba preocupado, corregía y corregía lo pintado, escondía el cuadro con decepción enfermiza de mis propias fuerzas, de nuevo lo sacaba e iba al ataque. A menudo experimentaba miedo. Me alejaba del cuadro, lo escondía. A mis amigos el lienzo causaba la misma impresión. Hubo algo que me impulsaba hacía la obra, y yo volvía a trabajar”.
Cuando fue presentado en una exposición en 1885, la sociedad rusa quedó convulsionada, inmediatamente defensores y detractores se esgrimieron en una serie de disturbios que fue necesario ponerle resguardo policial. En aquel momento el coleccionista, Pavel Tetryakov la compró para exponerla en la galería que hoy lleva su nombre, pero el zar Alexander III prohibió la exposición, aunque luego de tres meses tal decisión fue anulada.
El primer ataque que sufrió fue en 1913, cuando el pintor y fanático religioso, Abram Balashov de 29 años atacó el lienzo con un cuchillo realizando tres cortes en el rostros de Iván y su hijo mientras gritaba: “¡Basta de muerte, basta de derramamiento de sangre!”. Después de enterarse del incidente, el conservador de la galería de Tretiakov, Gueorgui Jrúslov, se suicidó saltando debajo de un tren. Estaba muy avergonzado porque su personal no supo mantener el cuadro a salvo.
Inmediatamente Repin se encargó de restaurar la obra. Con el paso de los años y este hecho a cuestas, el cuadro fue protegido para posibles intentos de futuros ataques.
Y no se equivocaron, el 25 de mayo del 2018 sufrió un segundo ataque; Igor Podporin irrumpió borracho en la sala y sin pensarlo tomo un poste protector y rompió el vidrio asentándole al lienzo tres cortes.
El cuadro es extremadamente sobrecogedor, muestra a dos personajes: Iván IV apodado “”El Terrible”, primer zar del Imperio Moscovita, y su primogénito, Iván Ivanovich, algunos historiadores cuentan que este hecho sucede cuando Iván IV, en uno de sus ataques coléricos, trata de golpear con un bastón a la esposa de su hijo, estando embarazada, por vestir ropas poco decentes y cuando el hijo se enfrenta a su padre, este lo golpea fuertemente en la sien lo que acaba con su vida. Ante el hecho, el zar inmediatamente se arroja a abrazar a su hijo tratando de obstruir la salida de sangre, en un momento de lucidez y arrepentimiento. El pintor consigue captar perfectamente la mirada de horror, dolor y culpa del zar en ese momento.
Los expertos concluyen que Repin tuvo la capacidad de captar la psicología de cada personaje, dándole a la escena un entorno tenebrista tan solo iluminando a padre e hijo, esto genera que el espectador centre su atención en el hecho ocurrido que unido a la carga psicológica y expresiva del cuadro cree múltiples sensaciones en quien lo admira y eso incluye a algunos “desequilibrados” que sienten el deseo irrefrenable de destruirla, en algunos casos ultra nacionalistas que consideran que el cuadro no muestra un hecho verdaderamente histórico. Para Iliá Repin la trama de la obra constituyó una metáfora de los acontecimientos de su época.
Referencias:
https://historia-arte.com/obras/ivan-el-terrible-y-su-hijo
http://culturamir.com/cuadro-repen-ivan-el-terrible/
https://actualidad.rt.com/…/273420-rusia-cuadro-ivan-terrib…
Dámaso De Lario. La proyección exterior de Iván IV el Terrible: aproximación a su estudio. Revista de historia moderna, nº2. 1973.
