Está viejo y cambió el mono. Este hueón es un blanco perfecto para alguna peuca que quiera llevarse unos buenos morlacos en la era del #metoo. El viejo sabe que desde que este movimiento se posicionó como buscador de acosadores, y en donde algunos manilargas cayeron, es el momento de colgar el micrófono, o por lo menos no brillar mucho.
Hasta se puso el parche antes de la herida hace algún tiempo. Jugó por adelantado el culeao pillo.