niggatzu
Plasta
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Hay que aclarar si fueron TIBURÓNES O TIBURONAS.
Las vacaciones en las paradisiacas Bahamas de una familia de California acabaron en tragedia. Jordan Lindsey -la hija de 21 años- murió el pasado miércoles 27 de junio al ser atacada por un grupo de tres tiburones mientras hacía snorkel con su madre en una zona próxima a Rose Island, al este de la capital Nassau. La joven -que estudiaba Comunicación en la Universidad de Loyola Marymount- participaba con sus padres en un tour con otros turistas.
Desesperación
Los hechos tuvieron lugar sobre las dos de la tarde (hora local) del pasado miércoles 27 de junio. La víctima se encontraba en la isla junto con sus padres y el resto de ocupantes de una embarcación que participaban en un tour turístico para hacer snorkel y ver de cerca la fauna autóctona de Rose Island. Según recogen varios medios internacionales, mientras Jordan y su madre se zambullían en las cristalinas aguas de las Bahamas, tres tiburones empezaron a rodear a la chica. A pesar de los gritos de su progenitora, la joven no se dio cuenta de la presencia de los peces hasta que fue demasiado tarde. Uno de los tiburones se llevó el brazo derecho de la chica de un mordisco.
Las vacaciones en las paradisiacas Bahamas de una familia de California acabaron en tragedia. Jordan Lindsey -la hija de 21 años- murió el pasado miércoles 27 de junio al ser atacada por un grupo de tres tiburones mientras hacía snorkel con su madre en una zona próxima a Rose Island, al este de la capital Nassau. La joven -que estudiaba Comunicación en la Universidad de Loyola Marymount- participaba con sus padres en un tour con otros turistas.
Desesperación
Los hechos tuvieron lugar sobre las dos de la tarde (hora local) del pasado miércoles 27 de junio. La víctima se encontraba en la isla junto con sus padres y el resto de ocupantes de una embarcación que participaban en un tour turístico para hacer snorkel y ver de cerca la fauna autóctona de Rose Island. Según recogen varios medios internacionales, mientras Jordan y su madre se zambullían en las cristalinas aguas de las Bahamas, tres tiburones empezaron a rodear a la chica. A pesar de los gritos de su progenitora, la joven no se dio cuenta de la presencia de los peces hasta que fue demasiado tarde. Uno de los tiburones se llevó el brazo derecho de la chica de un mordisco.