Bolas con tierra
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Para los que tienes indoor, aca esta la mano .
De la sensibilidad de las plantas por la música se habla ya en los textos indiano, donde el Dios Krishna ayudaba el crecimiento de la vegetación con sus melodías En la literatura tamilica, una de las mas antigua de la India, se habla sobre como la caña de azúcar ama oír el zumbido de los escarabajos. ¿La música puede afectar el crecimiento de las plantas? Según muchas investigaciones esto es cierto.
El doctor Singh, jefe del departamento de botánica de la universidad de Annamalai (Madras) invitó a su amigo músico a tocar por 25 minutos cada mañana frente a unas Balsaminas en maceta, después de un mes fueron comparadas con otras de las misma especies y edad, el resultado fue que las plantas que escucharon la música crecieron un 20 % mas que las otras y su follaje era 72% mas abundante.
Continuando con sus experimentos logró obtener cultivos de arroz 25-60% superior a la media simplemente poniendo música con un gramófono.Con el mismo procedimiento logró aumentar de un 50% los cultivos de maní y tabaco de mascar.
En Illinois E. Smith, investigador y botánico, por 24 horas al día puso la Rapsodia en blue de george gershwin a unos cultivos de maíz y soja consiguiendo que las plantas florecieran antes de las que crecieron sin música.
Mary Measures e Pearl Weinberger, dos biólogas de Ottawa, descubrieron que la reacción de las plantas se hace más evidente cuando el sonido está compuesto por una única nota con una frecuencia de 5000 hertz.
En el 1968 Dorothy Retallack de Denver descubrió que, poniendo dos notas musicales por cinco minutos seguido de cinco minutos de silencio por 12 horas, provocaba que todas las plantas se murieran, tal vez por aquel sonido obsesivo.
Otro experimento muy interesante fue efectuado por dos estudiantes de Denver que pusieron algunas plantas de Melopopone en dos habitaciones diferentes, a unas les pusieron música clásica y a las otras música Rock.
Las plantas que escucharon la música clásica crecieron en dirección de la radio, más bien una llegó a pegarse a la radio, en cambio las otras que escucharon música rock se alejaron de la radio intentando escalar la pared de la jaula de vidrio.
La misma Dorothy Retallack volvió a repetir el experimento observando que otros tipos de plantas reaccionaban de la misma manera dirigiéndose hacia el sonido cuando se trataba de música clásica y alejándose de los ritmos modernos.
Resulta que las plantas sufren una intolerancia absoluta hacia el rock duro, mientras les agrada muchísimo la flauta indiana, con la música country y el folk están totalmente indiferentes.
De la sensibilidad de las plantas por la música se habla ya en los textos indiano, donde el Dios Krishna ayudaba el crecimiento de la vegetación con sus melodías En la literatura tamilica, una de las mas antigua de la India, se habla sobre como la caña de azúcar ama oír el zumbido de los escarabajos. ¿La música puede afectar el crecimiento de las plantas? Según muchas investigaciones esto es cierto.
El doctor Singh, jefe del departamento de botánica de la universidad de Annamalai (Madras) invitó a su amigo músico a tocar por 25 minutos cada mañana frente a unas Balsaminas en maceta, después de un mes fueron comparadas con otras de las misma especies y edad, el resultado fue que las plantas que escucharon la música crecieron un 20 % mas que las otras y su follaje era 72% mas abundante.
En Illinois E. Smith, investigador y botánico, por 24 horas al día puso la Rapsodia en blue de george gershwin a unos cultivos de maíz y soja consiguiendo que las plantas florecieran antes de las que crecieron sin música.
Mary Measures e Pearl Weinberger, dos biólogas de Ottawa, descubrieron que la reacción de las plantas se hace más evidente cuando el sonido está compuesto por una única nota con una frecuencia de 5000 hertz.
En el 1968 Dorothy Retallack de Denver descubrió que, poniendo dos notas musicales por cinco minutos seguido de cinco minutos de silencio por 12 horas, provocaba que todas las plantas se murieran, tal vez por aquel sonido obsesivo.
Otro experimento muy interesante fue efectuado por dos estudiantes de Denver que pusieron algunas plantas de Melopopone en dos habitaciones diferentes, a unas les pusieron música clásica y a las otras música Rock.
La misma Dorothy Retallack volvió a repetir el experimento observando que otros tipos de plantas reaccionaban de la misma manera dirigiéndose hacia el sonido cuando se trataba de música clásica y alejándose de los ritmos modernos.
Resulta que las plantas sufren una intolerancia absoluta hacia el rock duro, mientras les agrada muchísimo la flauta indiana, con la música country y el folk están totalmente indiferentes.