A través de su perfil en Facebook, la líder sindical mostró su rechazo a la huelga que mantienen los docentes de base a lo largo del país, la que calificó de “equivocada”. En ese sentido, sostuvo que “bajo esta movilización violenta e inorgánica solo estamos infringiendonos un autoderrota para poder incidir en los debates estructurales que vienen”.
En ese sentido, acusó a un “movimiento” que buscaría debilitar el Colegio de Profesores “solo porque no se hace las cosas como unos quieren o simplemente porque creen que el problema de fondo es la salida de Jaime Gajardo como sí nosotros fuéramos el enemigo y obstáculo para los cambios”.
La ex docente y otrora dirigente del Magisterio, sentenció que el quiebre al interior del gremio no sólo favorecería a los sectores conservadores, sino que incluso iría en línea con los sectores disidentes del oficialismo.
“Hoy, no es sólo la derecha la que de frota las manos con este movimiento, son todos aquellos, incluso dentro de la nueva mayoría, los que paciente y alegremente esperan la caída del gremio para tener un actor menos defendiendo la educación pública”, sentenció Figueroa.
Además, enrostró los supuestos “niveles de agresividad” contra los dirigentes que se mantienen aún leales a la cuestionada conducción de Jorge Gajardo.
Por otro lado, descartó de manera enfática “dar un paso al costado”, haciendo de paso un llamado a que “ninguno de nosotros debe renunciar”, en un claro gesto al actual presidente del Colegio de Profesores.
“No daré un paso al costado como muchos esperan de nuestra conducción, ninguno de nosotros debe renunciar, si realmente aquí hay un genuino respeto por las bases, no debe serlo solo por las movilizadas y en mi caso, no me esconderé para evitar la crítica y enfrentaré con la responsabilidad que me entregaron mis colegas con su voto”, concluyó.
Recordemos que el conflicto al interior del Colegio de Profesores se generó luego que la directiva nacional firmara un acuerdo con el Mineduc y que no satisface del todo los cinco puntos de la agenda corta que solicitaban los educadores.
Esto tiene relación con la titularidad para los profesores a contrata, ingreso mínimo docente, fin al agobio laboral por el exceso de intervencionismo, bono de incentivo al retiro y reparación de la deuda histórica; no obstante, en el acuerdo sólo se tomó en consideración el primero y el cuarto punto.
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