Después de un carrete, el pololo acompaña a la polola al edificio donde ella vive. Cuando llegan a la entrada, él, adoptando una posición canchera, apoya una mano en la pared, y le dice:
* Mi amor, ¿Por que no me lo chupai un rato?
* Ella le contesta - ¿Aquí?... ¿tai weón?
* Yapo, si es cortita, no pasa na'...
* ¡No! puede bajar alguien de la familia a sacar la basura o llegar algún vecino que me reconozca. Pero si es un ratito no más... y a esta hora no viene nadie... ¡Yapo!
* ¡Que no, hombre, que si bajan la basura...!
* Yapo, si a ti te gusta, una chupaíta nomás.
* ¡No! que pueden bajar...
* Yapo, no seai así...
* ¡Te digo que no, que no y que NOOOO! ¡¡ENTIENDE!!
* Yapo, si te agachai no te ve nadie, tontita...
* ¡¡¡NO, NO y NO!!!
En ese momento, aparece la hermana de la chica, despeinada y cagá de sueño, y le dice:
* Dice mi papá que ya sacó la basura, que se lo chupes de una vez y si no, que se lo chupe yo, y si no, dice que baja él y se lo chupa, pero ¡¡que por favor este huevón saque la mano del citófono, porque son las 5 de la mañana!!
y repetio...
