MarquesVrolok
Ocios@
- Registrado
- 2010/04/29
- Mensajes
- 7.700
- Sexo
Es el primer fallo contra una organización dedicada a ingresar a extranjeros con fines laborales. Investigación estuvo encabezada por la fiscal jefe de Arica, Javiera López.
El Tribunal Oral Penal de Arica declaró culpables a los integrantes de una banda que intentaba trasladar al sur de Chile a 9 personas –entre ellas una mujer embarazada y su hijo de 3 años- ocultas en un camión. Se trata de la primera condena en el país contra una organización especialmente dedicada a ingresar de manera clandestina a extranjeros con fines laborales. La banda fue detectada en abril pasado en el control carretero de Cuya.
En un juicio abreviado, fueron condenados Rubén Quispe Mamani y Juana Anteman Araya, quienes recibieron una sentencia de 661 días de pena remitida, mientras que Paola Villca Apala recibió 761 días de reclusión nocturna. La investigación –dirigida por la fiscal jefe de Arica Javiera López quien trabajó con la Brigada de Investigaciones Especiales (Bipe) de la PDI- estableció que la organización, a través de la coordinación con ciudadanos peruanos, captaba a extranjeros en la ciudad de Tacna. A estas personas se les ofrecía ingresarlos clandestinamente a Chile y posteriormente trasladarlos hasta la zona sur, previo pago de dinero. Una vez en nuestro país, los extranjeros eran transportados, generalmente, ocultos en vehículos de carga con la finalidad de eludir el control carretero policial de Cuya.
PAGABAN 50 DÓLARES CADA UNO
A través de diversas herramientas investigativas como la interceptación telefónica, se estableció que en los primeros días de abril ingresaron a Chile 8 ciudadanos peruanos –entre ellos una mujer embarazada con su hijo de 3 años-, además de una mujer de República Dominicana, que se alojaron en la residencial de Juana Anteman. En la noche del 5 de abril los extranjeros le cancelaron a Paola Villca la suma de 50 dólares cada uno por trasladarlos hasta el sur. Tras ello, abordaron el vehículo de propiedad de Rubén Quispe, siendo transportados hasta las cercanías del control carretero. En ese lugar descendieron y debieron caminar –a excepción de la mujer embarazada y su hijo- rodeando un riachuelo que les permitió eludir el complejo policial, para posteriormente abordar nuevamente el móvil con la finalidad de seguir con destino a Iquique. “El camión fue fiscalizado una vez pasado el control carretero y allí se descubrió que los extranjeros iban ocultos debajo de una lona de color negro”, informó la fiscal Javiera López.