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El tema de la Conmemoración de los 50 años de la DICTADURA Militar

Kenose

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Macho
Ya que ya están empezado a saturarnos en todas partes con la conmemoración de los 50 años del pronunciamiento militar, abro este hilo para contar la historia verdadera de como se llego al pronunciamiento militar., no será la versión oficial, pero sí la antroniana:



1. USO DE GRUPOS ARMADOS PARA LA IMPOSICIÓN DEL SOCIALISMO EN CHILE. VIOLACION SISTEMATICA A LOS DERECHOS HUMANOS.

La violencia política, fundamentada en la lucha de clases, fue apoyada y promovida por el gobierno de Salvador Allende, quien abiertamente se autodenominaba marxista-leninista. Allende era consciente de que no tenía los medios para imponer el socialismo por la vía Armada, sin embargo, sabía que tarde o temprano tendría que emplearla, y de ahí radica sus tan contradictorias acciones.

Debido a la gran cantidad de terroristas de izquierda indultados por Allende, y también, al haber disuelto por decreto “el grupo móvil de carabineros”, grupo encargado de perseguir a los grupos insurgentes, es que movimientos terroristas como el MIR, el VOP o el MAPU, actuaron a sus anchas y con total impunidad durante el gobierno de la Unidad Popular, asesinando a una gran cantidad de opositores políticos y fuerzas de orden.

En Santiago, el cordón Cerrillos era un barrio en la periferia industrial de Santiago, sede tradicional en aquellos años de los grupos más agresivos y organizados de la extrema izquierda y del terrorismo, con el reconocimiento gubernativo y, de hecho, rebautizados como Comandos Comunales. Desde allí (y desde otros cordones como Vicuña Mackenna, Panamericana Norte, San Miguel, Barrancas, Conchalí, Estación Central, Macul, San Bernardo y Mapocho) se iniciaban las expediciones punitivas contra los opositores a Allende y desde allí partían también las escuadras encargadas de ocupar ilegalmente fábricas y propiedades privadas. En Melipilla, por ejemplo, los extremistas de los cordones ocuparon y expropiaron, en enero de 1973, al menos 44 empresas privadas, tanto agrícolas como industriales.

En algunas zonas poco habitadas, el MIR controlaba regiones enteras. Causó estupor el caso de un jefe mirista llamado José Gregorio Liendo, quien bajo el nombre de “Comandante Pepe” y con el apoyo de una banda de individuos armados, logró crear para sí y sus seguidores una enorme propiedad con 17 haciendas, en las cercanías del lago Panguipulli, zona limítrofe con Argentina.

Se cometieron muchos crímenes en las ocupaciones violentas de explotaciones agrarias, en su mayor caso cometidos por el Movimiento Campesino Revolucionario, una franquicia del MIR en el mundo rural.

Crímenes similares se cometieron a lo largo de todo el país. Están documentadas más de 500 muertes entre propietarios y trabajadores que se defendían de las ocupaciones promovidas y alentadas por Allende. Entre ellos Rolando Matus, el agricultor Gilberto González y los suboficiales Aroca Cuevas, entre muchos otros.

En marzo de 1972 se descubrió que un avión de Cubana de Aviación había descargado numerosos bultos con armamentos procedentes de la isla caribeña, el Ministro del Interior impidió personalmente que los bultos fuesen revisados por la aduana y se encargo de que fuesen trasladados a la residencia presidencial, ante un requerimiento de la Contraloría, Allende se vio forzado a reconocer que los bultos los tenía él en su poder, pero sin embargo, se negó a informar sobre el contenido de los mismos, posteriormente se descubrió que contenían ametralladoras, pistolas, bazucas y municiones, la empresa Cubana de Aviación así como también barcos procedentes de las Unión Soviética continuaron realizando numerosos desembarcos.

El Gobierno de Allende favorecía en Chile el contrabando de aquellas armas, prohibiendo a las autoridades aduaneras realizar los debidos controles. En la residencia privada de Allende, estaban depositados a disposición del GAP 62 fusiles ametralladoras, 426 pistolas y 6 lanzamisiles. Las otras armas del GAP estaban escondidas en la residencia presidencial de El Cañaveral.

Por su parte, también la Unidad Popular había preparado un comando militar unitario, repartido entre los partidos de Gobierno y que incluía entre otros a Carlos Altamirano, del Partido Socialista, y a Oscar Garretón, del MAPU. Miguel Enríquez, por cuenta del MIR y con el beneplácito de Allende, era muy activo en organizar formaciones guerrilleras y enviaba a jóvenes chilenos a Cuba para que participaran en los cursos de guerrilla y sabotaje.

El joven senador democratacristiano Rafael Moreno mostró en el Parlamento las pruebas de que los socialistas realizaban un intenso e ilegal comercio de armas para equipar a los terroristas. Y demostró que no pocos militantes socialistas, comunistas y de la Izquierda Cristiana estaban listos para unirse a los terroristas en el ataque final de Allende.



2. DESTRUCCIÓN ABSOLUTA DE LA ECONOMÍA DEL PAÍS COMO CONSECUENCIA DE LA IMPLEMENTACIÓN DEL SOCIALISMO.

Allende había recibido del Gobierno anterior reservas por 350 millones de dólares y en menos de dos años (junio de 1972) ya tenía un déficit de 650 millones de dólares. En 1972, Chile debía 200.000 millones de escudos y tenía en caja apenas 200 millones.

Una de las brillantes medidas económicas de la Unidad Popular, de parte de su ministro de economía, Pedro Vuskovic, fue decretar que los comerciantes debían tener ganancia cero, y por lo tanto vender al precio "oficial", lo que provoco el cierre masivo de los comercios independientes, y dejó el camino libre a las JAP para así monopolizar estatalmente el comercio chileno.

Por su parte, también se realizaron masivas emisiones inorgánicas de papel moneda efectuadas por el Banco Central, las cuales al no estar respaldadas por trabajo productivo, provoco unos efectos inflacionarios nunca antes vistos a nivel mundial hasta ese entonces.

La inflación en cifras oficiales del gobierno llegó a 323 por ciento en los últimos doce meses, pero los institutos universitarios, teniendo consideración que prácticamente el país vivía del mercado negro, estimaban que ésta superaba el 600 por ciento.
El dólar en el mercado libre se transaba al término del gobierno de la Democracia Cristiana a 20 escudos por dólar. En el mes de agosto de 1973 llegaba a los 2.500 escudos por dólar, o sea, una devaluación de más o menos el 12.000 por ciento.

La DIRINCO, reguladora de la industria y el comercio presidida por un tal Alberto Martínez, proveniente de Cuba, se transformó en un instrumento para controlar los precios al consumidor, con la finalidad de hacer quebrar a las empresas privadas, o al menos de hacerlas menos competitivas respecto a las estatales y las JAP.

Allende, desde 1971 en adelante, como ha constatado la periodista norteamericana Susan Huck, logró expropiar oficialmente 4.394 predios agrícolas, además de los 2.000 ocupados ilegalmente por los activistas y terroristas del MIR. Según un cálculo del investigador inglés Robert Moss, en octubre de 1972 el Gobierno de Allende controlaba ya el 80% de las grandes industrias, el 85% de los bancos, el 84% de las empresas de construcción, el 80% de las grandes industrias, el 75% de las empresas agrícolas y el 52% de las medianas y pequeñas empresas.

Muchas grandes empresas agrícolas estatales (Centros de Reforma Agraria) nacieron en 1971 y 1972 eran enormes elefantes blancos improductivos y parasitarios que, en poco tiempo, controlaron el 60% de los terrenos regados, pero cuya finalidad verdadera era la de acomodar en ellos a cualquier persona del partido.

El resultado fue que en muchas zonas, como lo reveló en 1971 la periodista estadounidense Susan Huck, sólo el 10% del territorio expropiado era arado.

El resultado de esta política suicida fue no solamente la disminución de la producción que ya hemos mencionado, sino también una disminución en el consumo familiar, unida obviamente a un aumento de las importaciones. Para dar solamente dos ejemplos, los consumos de carne (Chile es productor) disminuyeron en 1971 un 10% y en 1972 otro 13%, al mismo tiempo que las importaciones agrícolas, que en 1970 eran de 217 millones de dólares anuales, llegaron a 295 millones de dólares en 1971 y a 400 millones de dólares en 1972. Datos provenientes del Banco Central y confirmados por la Universidad Católica y por la facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Chile.

Como consecuencia de que ya no se producía en el país, en razón a que la mayoría de las empresas y fundos estaban ocupados, la escasez de alimentos y productos de consumo básico comenzó a generalizarse y se formaban larguísimas colas para adquirirlos y esas colas eran cada vez más largas. El hambre empieza a masificarse, y Allende instaura la JAP, Juntas de Abastecimientos de Precios, entregando tarjetas de racionamiento a la poblacion, en donde solo los militantes de la UP podían acceder a dicha tarjeta.



3. EL PROYECTO TOTALITARIO DE ALLENDE CUYA FINALIDAD ERA ABARCAR TODO AMBITO DE LA SOCIEDAD CIVIL.

Allende quería derrocar la justicia burguesa, y constituir “asambleas populares”. De acuerdo con una ley propuesta en enero de 1971, que no fue aprobada en el Parlamento. Los jueces de los tribunales populares, deberían ser elegidos por las “asambleas populares”, con atribuciones para removerlos del cargo.

Allende quería eliminar la libertad de enseñanza por medio de una ley que obligaba a homogenizar la educación mediante la Escuela nacional unificada (ENU).

Allende intento controlar y limitar la compra de bienes mediante el establecimiento de las Juntas de abastecimiento y precios (JAP); las funciones de dichos organismos iban más allá de señalar irregularidades comerciales: la verdadera finalidad de las JAP era la de ejercer un control político y de señalar las eventuales desviaciones ideológicas.

Allende intento controlar toda la economía del país, estatizando todo el sistema productivo-comercial-industrial-bancario del país. Según un cálculo del investigador inglés Robert Moss, en octubre de 1972 el Gobierno de Allende controlaba ya el 80% de las grandes industrias, el 85% de los bancos, el 84% de las empresas de construcción, el 75% de las empresas agrícolas y el 52% de las medianas y pequeñas empresas.

Allende intento controlar y censurar todos los medios de comunicación. En octubre de 1972, despreciando el artículo 10 de la Ley de Prensa que prohíbe cualquier tipo de censura y bajo la justificación del “grave momento social”, Allende introdujo normas que prohibían la difusión de noticias que no hubieran sido aprobadas por la Oficina de Radiodifusión de la Presidencia de la República.
Pero el Gobierno y los partidos de izquierda tenían, además, otros medios para dañar a los periódicos, radios y canales de televisión hostiles. Se apoyaban solapadamente en huelgas y ocupación de establecimientos tipográficos. Se imponían precios de ventas y tarifas publicitarias tales que ahogaban la autonomía financiera de los editores hostiles a Allende.
Los órganos de información cercanos a la oposición sufrían limitaciones e imposiciones de tipo económico y fiscal igualmente humillantes.
Y esto no es todo, oficialmente fue impuesta la censura a todas las radios y canales de televisión, a los que se les permitía transmitir solamente los noticieros del Gobierno. Vanas fueron las protestas de la ARCHI (Asociación de Radiodifusores de Chile). En protesta, algunas radioemisoras, como Agricultura y Minería, se descolgaban clandestinamente de la cadena oficial y transmitían noticias libres, provocando la euforia de la ciudadanía.
Fueron clausuradas muchas radios como Radio Agricultura, y expropiados muchos diarios como El Sur y La Mañana que habían sido expropiados por el MIR.
El Mercurio, fue sometido a una confiscación de toda su documentación, además, se prohibió publicar avisos del gobierno en diarios no marxistas, las brigadas o círculos violentos protagonizaron frecuentes atentados en contra de los diarios y las emisoras de radio que se oponían al gobierno, ocuparon además varios de esos diarios sin que nada hicieran las fuerzas públicas por impedirlo.
El Gobierno pasó a controlar 8 de los 13 diarios de la capital, además de controlar también la única estación televisora de alcance nacional que existía en Chile.

Allende intento controlar a las Fuerzas Armadas y ponerlas de su parte. Así, en noviembre de 1972, con lo que fue definido en varias partes como un intento de autogolpe, Allende llamó a tres generales a compartir las responsabilidades de Gobierno. Y como consecuencia, desde el 2 de noviembre de 1972 al 28 de marzo de 1973, en el gabinete de Allende se encontraron tres ministros militares: el almirante Ismael Huerta y los generales Carlos Prats González y Claudio Sepúlveda.
Hubo, mientras tanto, un segundo intento de Allende para poner a los militares en el Gobierno. Este fue realizado a través del general Carlos Prats González, pero el intento fracasó después de dos semanas de estériles negociaciones.




4. USO DE LOS RESQUICIOS LEGALES, CON LA FINALIDAD DE ELIMINAR LA PROPIEDAD PRIVADA DE LOS MEDIOS DE PRODUCCIÓN.

Esto, fue algo fríamente calculado por parte del asesor jurídico de Allende, Eduardo Novoa, y consistía, básicamente, en usar normas legales existentes pero casi olvidadas, cuya finalidad era regular ciertos casos -excepcionales-. Sin embargo, el gobierno de Allende abuso de dichas leyes, las alejó de sus reales fines, y las aplicó a la generalidad de los casos. Es así que los resquicios legales constituyeron un medio para alcanzar la implementación del estado socialista que tanto anhelaba Allende. Algunos de esos mecanismos fueron los siguientes:

  • Decreto 338 de 1945. Requisiciones por la DIRINCO (Dirección de la Industria y Comercio). Mediante este mecanismo, los trabajadores paralizaban las industrias dejándolas paralizadas, y bajo ese pretexto, inspectores de la DIRINCO tomaban el control de la administración de las industrias Un ejemplo fue el de la Empresa Manufacturera de Algodón Yarur, cuyos trabajadores se encontraban en huelga en el mes de Abril de 1971, como consecuencia de ello la industria estaba paralizada. Según DIRINCO, la huelga referida provocaría una “falta de abastecimiento de los productos que fabrica dicha industria con grave perjuicio para el consumo nacional”, por lo cual procedía su requisición. Fueron cientos las industrias requisadas bajo éste resquicio legal.
  • Si bien, la doctrina y jurisprudencia habían sido unánimes en señalar que no se podían requisar inmuebles, la Contraloría, ya bajo el gobierno de Allende, sostuvo que sí era posible realizar la requisición de inmuebles.
  • Decretos de insistencia. Sin perjuicio de lo indicando anteriormente, en ciertas ocasiones, la Contraloría se negaba a tomar razón de ciertas resoluciones requisitorias. Pero el gobierno de Allende, mediante decretos de insistencia, doblegaba las decisiones de Contraloría, e igualmente hacía aprobar dichas requisiciones contrarias a la Ley. Los decretos de insistencia, conforme a la Constitución, permitían al Ejecutivo prescindir de los reparos de la Contraloría. Se exigía al efecto que el decreto lo firmen el presidente y todos sus Ministros de Estado. Concebido como un procedimiento excepcional, para casos calificadísimos, graves y urgentes, la Unidad Popular lo convirtió en un mecanismo rutinariamente usual, con el cual gobernó al margen de la ley.
  • Intervención de las empresas a través del decreto de Reanudación de Faenas. Esta medida podía basarse en el artículo 171 de la Ley N° 16.640 sobre Reforma Agraria, o artículo 4 de la Ley 17.704. Un ejemplo fue el Diario La Mañana de Talca. La empresa periodística, paralizo sus funciones en el mes de agosto de 1971 por una huelga ilegal de su personal. Ante lo cual, el gobierno nombró a don Francisco Reyes como interventor del diario, bajo la excusa de que se debía realizar una reanudación de faenas y la reincorporación del personal. Fueron cientas las empresas y fundos intervenidos bajo ese pretexto.
  • Expropiaciones en base al D.L 520 de 1932. Quizás el artilugio y resquicio legal más conocido por todos. El artículo 5 de dicho decreto, estipulaba lo siguiente: Todo establecimiento industrial o comercial y toda explotación agrícola que se mantenga en receso podrá ser expropiado por el Presidente de la República a solicitud de la Superintendencia de Abastecimientos y Precios, previo informe favorable del Consejo de Defensa Fiscal. Dicho decreto, sin embargo, establecía que dichas expropiaciones solo procederían en caso de necesidad imperiosas de las subsistencias del pueblo, sin embargo, se utilizó de forma constante expropiándose bajo ese mecanismo cientos de fundos y empresas, por medio de indemnizaciones irrisorias, o en larguísimas cuotas.
Los efectos de éstas medidas que se encontraban al borde de la Ley, fue, que contrariando la voluntad mayoritaria del país, Chile se estaba convirtiendo en un estado socialista. Según un cálculo del investigador inglés Robert Moss, en octubre de 1972 el Gobierno de Allende controlaba ya el 80% de las grandes industrias, el 85% de los bancos, el 84% de las empresas de construcción, el 80% de las grandes industrias, el 75% de las empresas agrícolas y el 52% de las medianas y pequeñas empresas.



5. DESACATO DELIBERADO DE LAS RESOLUCIONES DEL PODER JUDICIAL Y DICTAMENES DE LA CONTRALORIA.

Ante las resoluciones del poder judicial, el gobierno de Allende simplemente llamaba a no obedecerlas. A veces se dictaminaban desalojos, pero Allende enviaba a sus matones para impedir el cumplimiento de dichas resoluciones. La Corte Suprema, mediante un recurso de queja, ordeno el desalojo de los ocupantes de el Diario La Mañana de Talca. Sin embargo, el Jefe de Zona de Emergencia (funcionario de gobierno) no había dado la autorización para practicar el desalojo porque traería graves alteraciones para el orden interno de la ciudad.

De esa forma quedaban burladas las resoluciones de los tribunales de justicia. Así, por ejemplo, mediante oficio a Carabineros de Chile, el general Prats, afín al gobierno, ordenaba lo siguiente: “en un caso conflictivo que incida en los deberes que señala el artículo 45 de la ley de Régimen Interior, el Intendente Gobernador comunicará por escrito al Ministerio del Interior y al Jefe de Carabineros, que es indispensable suspender la ejecución del desalojo, a fin de deslindar responsabilidad de la fuerza pública”. En definitiva, los tribunales quedaban absolutamente sujetos a lo que resolviera la autoridad política, pues las fuerzas de orden seguían las directrices del gobierno, quedando los propietarios y víctimas no afines a la Unidad Popular en el más completo abandono. Además, el Director General de Investigaciones de Chile en esos tiempos era Eduardo Paredes, totalmente afín a la Unidad Popular.

Mostrando síntomas de hastío, ante el deliberado desacato de las resoluciones judiciales, la Corte Suprema, en uno de sus tantos oficios al Presidente, le planteaba lo siguiente: “por enésima vez la actitud ilegal de la autoridad administrativa en la ilícita intromisión en asuntos judiciales, así como la obstrucción de Carabineros en el cumplimiento de órdenes emanadas de un Juzgado del Crimen que de acuerdo con la ley, deben ser ejecutadas por dicho cuerpo sin obstáculo alguno”.

Cuando la Corte de Apelaciones declaraba nulas las decisiones expropiatorias (como las célebres de las textiles Sumar y Oveja Tomé), Allende recurría al sistema de decretos de insistencia que le permitían, solamente en emergencias excepcionales, imponer su voluntad a la de los tribunales.

Además de lo anterior, Allende abuso de la facultad del indulto, e indulto a decenas de terroristas de izquierda, únicamente por ser afines ideológicos a él. Entre los indultados, están los hermanos Rivera Calderón, quienes terminaron asesinado a Edmundo Pérez Zucovic en 1971, ex ministro de Frei Montalva.

Por otra parte, se hizo habitual que Allende no respetará los dictámenes de la Contraloría General de la República, para lo cual hizo un uso abusivo de los decretos de insistencia. Ellos, conforme a la Constitución, permitían al Ejecutivo prescindir de los reparos de la Contraloría. Se exigía al efecto que el decreto lo firmen el Presidente y todos sus Ministros de Estado. Concebido como un procedimiento excepcional, para casos calificadísimos, graves y urgentes, la Unidad Popular lo convirtió en un mecanismo rutinariamente usual, con el cual gobernó al margen de la ley. Ante lo cual, la Contraloría, con fecha 02 de Julio de 1973, emitió una declaración haciendo presente los desacatos del gobierno de Allende.



6. MASIVAS PROTESTAS DEL PUEBLO EN CONTRA DE ALLENDE. PRONUNCIAMIENTO DE TODA LA INSTITUCIONALIDAD DEL PAIS EN CONTRA DEL ACTUAR DE ALLENDE.

La noche antes de la partida de Castro se produjo en Santiago un inmenso cacerolazo, las amas de casa salieron a las calles a protestar por la escasez de alimentos, el gobierno desató contra ellos la represión más violenta a la cual se agregó la acción de los círculos, centenares de mujeres cayeron asfixiadas por los gases lacrimógenos y heridas por los golpes de palos y cadenas, los agresores fueron una vez más protegidos por el gobierno.
La Marcha de las Cacerolas fue la chispa que encendió el descontento latente y entonces el gobierno decretó el estado de emergencia, las Fuerzas Armadas tuvieron que restablecer el orden.

La protesta popular verdadera, bajo la forma de huelgas y manifestaciones, toma cuerpo en octubre de 1972, a partir de una huelga de camioneros que se sintieron amenazados por un proyecto del Gobierno de crear una compañía estatal de transporte.

A los camioneros se les unieron luego estudiantes, docentes, comerciantes, empleados de bancos, campesinos, pilotos de las líneas aéreas, choferes, marineros mercantes y los colegios de abogados, médicos, ingenieros y arquitectos.

La escasez de bienes más esenciales, la inflación, el desempleo y el clima de violencia produjeron manifestaciones que tuvieron un alcance nacional, muchas actividades se paralizaron, los transportistas, los comerciantes, los industriales, obreros y empleados, más de 400 mil campesinos y unos 500 mil estudiantes se plegaron al paro.

El 21 de octubre de 1972 se realizó un encuentro entre los representantes de los huelguistas (comando gremial) y las autoridades de Gobierno. Los huelguistas pedían la restitución de los bienes expropiados, la aceptación de una vieja propuesta de ley que limitaba la facultad del Gobierno de nacionalizar las empresas privadas, la supresión de los comités de los barrios, la expulsión de los terroristas extranjeros (particularmente los cubanos y europeos), el injusto valor de los precios fijados por el Gobierno a la Papelera, el final de la censura sobre la información y la garantía de que no se realizarían represalias contra los huelguistas.

El 29 de junio de 1973 los tanques del coronel Roberto Souper Onfray se dieron una vuelta disparando por el centro de Santiago, lo que muchos vieron como un indicio del descontento militar por la situación en que se encontraba el país. Por esos mismos días el senador Patricio Aylwin se encargaba de liderar a la CODE (Condeferación Democrática), que abarcando un amplio espectro de sectores radicales e independientes de descontento nacional.
Un nuevo paro nacional apoyado por trabajadores, empresarios, transportistas, mineros, estudiantes y campesinos se produjo a fines de julio de 1973, a partir de este momento y durante el siguiente mes y medio el caos ya no se pudo detener.
El 23 de agosto de 1973, por una abrumadora mayoría, la Cámara de Diputados aprobaba un Acuerdo que declaraba ilegal al gobierno de Allende y llamaba a las FF. AA. a asumir sus responsabilidades para el resguardo de la integridad nacional.

El pronunciamiento militar fue apoyado por la Corte Suprema, la Contraloría y el Parlamento. Se agregó la declaración del Colegio de Abogados, que en extenso documento indicó al país que el sistema legal había sido reiterada y manifiestamente atropellado. Por otro lado, el Partido Radical de Izquierda, que apoyó al señor Allende en la elección y que formó parte de su gobierno, se retiró de él denunciando que había llegado a la certeza de que se iba al quiebre de la democracia por la acción del gobierno que integraban. Hombres que habían militado siempre en la izquierda chilena, que dirigían ese partido, señalaron con extrema dureza que el país estaba al borde del caos y que la voluntad del Ejecutivo era instaurar la dictadura totalitaria.
A esto se agregó el Colegio Médico, que tradicionalmente apoyó al señor Allende, pues este fue presidente de él; el Colegio de Ingenieros y todos los demás colegios profesionales.
Fue asimismo evidente un cambio en diversos sindicatos, que se manifestó en huelgas, de las cuales la más prolongada fue la de los obreros del Cobre.
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POR LA BOCA MUERE EL PEZ (Recopilación de declaraciones de personeros a la UP):



SALVADOR ALLENDE:

Lo he dicho aún antes de nuestra victoria, la lucha revolucionaria puede ser el foco guerrillero, puede ser la lucha insurreccional urbana, puede ser la guerrilla del pueblo (sic), la insurgencia como el cauce electoral; depende del contenido que se le de. Entonces, frente a algunos países no hay otra posibilidad que la lucha armada (Salvador Allende: En entrevista a Regis Debray, en Punto Final, 16 de marzo de 1971).


«El Congreso es la barricada desde donde han actuado para maniatar al gobierno Popular e impedir que cumpla su programa...» (Salvador Allende: Discurso ante el pueblo de Santiago el 22 de junio de 1973, publicado en El Siglo, 23 de junio de 1973).


Llamo al pueblo a que tome todas las industrias, todas las empresas; que esté alerta, que se vuelque al centro, pero no para ser victimado; que el pueblo salga a las calles, pero no para ser ametrallado; que lo haga, que lo haga con prudencia, con cuanto “elemento tenga en sus manos. Si llega la hora, armas tendrá el pueblo”.


«La lucha por el poder es el objetivo estratégico que el Partido Socialista ha de desarrollar en esta generación. La vía violenta es la única posible para asegurar el triunfo de la revolución y su mantención en el poder. La vía electoral sólo debe usarse como un medio de agitación y de propaganda, subordinada al camino de las armas. El PS debe adecuar su organización a esta nueva estrategia y organizar de inmediato sus milicias» (Salvador Allende, Clodomiro Almeida y Aniceto Rodríguez, máximos dirigentes del PS chileno: en El Mercurio, 28 de febrero de 1967).


«Necesitamos un mayor control en la distribución de los productos. Óiganlo bien, aquellos que creen que yo a veces vacilo: hay que fortalecer al poder popular [...]. Hay que fortalecer los cordones industriales, pero no como fuerza paralela al Gobierno, sino como fuerza popular junto a las fuerzas del Gobierno» (Salvador Allende: Discurso en el 40 aniversario del PS; publicado en el Boletín del Comité Central. Partido Socialista Nº 34-35, abril–mayo 1973).


«Y he dicho allí y lo he dicho en Chile, que nosotros –que no queremos la violencia– a la contrarrevolución y a la violencia reaccionaria (sic) responderemos utilizando primero la ley, después utilizaremos la violencia revolucionaria» (Salvador Allende: Discurso en la Plaza de la Revolución de La Habana, pronunciado el 13 de diciembre de 1972, publicado en Boletín del Comité Central. Partido Socialista, nº 30, enero de 1973).


«¡Como Presidente de la República, como militante del Partido Socialista y de la lucha social, combatiré implacablemente al fascismo (sic), penetraremos en sus madrigueras, aplastaremos su insolencia, defenderemos Chile, compañeros!».
«Será con la unidad combativa del pueblo (sic), con la decisión de las Fuerzas Armadas y de Orden –que tienen que acatar por mandato histórico de la Constitución y de la ley– que levantaremos una barrera infranqueable a las turbias maniobras de los fascistas (sic) y los reaccionarios (sic) que los apoyan» (Salvador Allende: Discurso ante el pueblo de Santiago el 22 de junio de 1973, publicado en El Siglo, 23 de junio de 1973).



ADONIS SEPULVEDA (SENADOR PS):

“Afirmamos que es un dilema falso plantear que debemos ir por la vía electoral o la vía insurreccional. El partido tiene un objetivo y para alcanzarlo deberá usar los métodos y los medios que la lucha revolucionaria haga necesarios. La insurrección se tendrá que producir cuando la dirección del movimiento popular comprenda que el proceso social, que ella misma ha impulsado, ha llegado a su madurez y se disponga a servir de partera de la revolución”. (Adonis Sepúlveda, 1965).


“el Partido ha desechado definitivamente la vía pacífica para llegar al poder. Estamos por la vía armada” Adonis Sepúlveda, PS, 1968



CARLOS ALTAMIRANO (SECRETARIO GENERAL DEL PS).

“Las tensiones hoy día deben llevarnos al choque. La revolución significa recurrir a la violencia”. (Carlos Altamirano, 1972).


“Nadie puede negarle al pueblo de Chile el derecho a su propia defensa, principio, por lo demás, consagrado universalmente. En uso pleno de ese derecho y ese deber, los trabajadores de todo el país se han organizado en los cordones industriales, comandos comunales, consejos campesinos, comités de defensa y vigilancia y otros organismos, que constituyen los gérmenes de un incipiente pero ya poderoso poder popular, y configuran una barricada inexpugnable ante cualquier tentativa insurreccional de la burguesía... Obreros, campesinos, pobladores, jóvenes, mujeres, están amasando su propio poder destinado a repeler el poder burgués amotinado. Frente a esta inobjetable posición patriótica, los soldados, marinos, aviadores y carabineros no pueden prestarse, en ningún momento y bajo ninguna circunstancia para asesinar trabajadores. Y llegado el caso en que algunos oficiales se alzaran, los oficiales, suboficiales, clases y soldados, no tienen la obligación de prestarles obediencia. Aún más claro: no sólo tienen el deber de negarse a acatar órdenes que signifiquen disparar contra el pueblo o participar en aventuras golpistas contra el Gobierno de los trabajadores, sino de oponerse activamente a ellas” Carlos Altamirano, PS

“a una reunión a la cual fui invitado para escuchar las denuncias de un suboficial y de algunos marineros, en contra de actos subversivos perpetrados supuestamente por oficiales de esa institución armada y concurriré todas las veces que me inviten para denunciar acciones contra el Gobierno Constitucional de Salvador Allende... El golpe reaccionario se ataja golpeando con la fuerza del pueblo, de sus cordones industriales, sus consejos campesinos, su organización. Y la guerra civil se ataja creando un verdadero poder popular... En esta hora es más que nunca necesario necesaria la unidad para defender el programa de la Unidad Popular, que dice que las transformaciones sólo se podrán hacer si el pueblo toma el poder” Carlos Altamirano, PS


«¡Nada ni nadie podrá impedir que este proceso se convierta en una revolución! No hemos sometido a plebiscito la revolución chilena. Las revoluciones no se hacen por votaciones» (Carlos Altamirano, Secretario General del Partido Socialista chileno: Discurso a la Juventud Socialista, 9 de febrero de 1973).



LUIS CORVALAN (SECRETARIO GENERAL DEL PC)

Al sostener desde 1956 la posibilidad de la vía pacífica en nuestro país, tuvimos en cuenta que se trataba sólo de una posibilidad, y además que de abrirse paso la revolución por dicha vía, en algún momento podría surgir la alternativa de la lucha armada. Consecuentemente nos preocupamos desde 1963 de la preparación militar de los miembros del partido” (Luis Corvalan, 1977).


«La Unidad Popular no tiene por objetivo buscar combinaciones para enfrentar mancomunados los próximos eventos electorales, aunque debe comprender la obligación de actuar también unidos en tales combates [...]. Su objetivo no es otro que abrir paso a la revolución chilena y tiene vigencia, por lo tanto, haya o no elecciones de por medio y fuera y dentro del marco de las lides electorales» (Luis Corvalán: en declaraciones a El Mercurio, 6 de agosto de 1969).


Que nadie se equivoque. La clase obrera (sic) y el pueblo (sic) no permitirán la vuelta atrás. En cualquier circunstancia pelearán, con la firme decisión de aplastar todo intento sedicioso. Los fascistas (sic) ya están notificados. No pasarán. Los que vengan por lana saldrán trasquilados» (Luis Corvalán, Secretario General del Partido Comunista chileno: Discurso en los 50 años del PC en Chile, citado en Farías, Víctor; «La Izquierda Chilena»..., Centro de Estudios Públicos, Santiago, Chile, 2000, tomo III, p. 1. 777.



DECLARACION DE PRINCIPIOS DEL PS.

“Nuestra estrategia descarta de hecho la vía electoral como método para alcanzar nuestro objetivo de toma del poder... Afirmamos que es un dilema falso plantear si debemos ir por la vía electoral o la vía insurreccional. El partido tiene un objetivo, para alcanzarlo deberá usar los métodos y los medios que la lucha revolucionaria hagan necesarios. La insurrección se tendrá que producir cuando la dirección del movimiento popular comprenda que el proceso social, que ella misma ha impulsado, ha llegado a su madurez y se disponga a servir de partera de la revolución... Sólo una concepción revolucionaria, una concepción marxista-leninista consecuente, nos permitirá una congruencia efectiva entre la estrategia y la acción diaria” Congreso PS, Linares, 1960

“1) El Partido Socialista, como organización marxista leninista, plantea la toma del poder como objetivo estratégico a cumplir por esta generación, para instaurar un Estado Revolucionario que libere a Chile de la dependencia y del retraso económico y cultural e inicie la construcción del Socialismo.
2) La violencia revolucionaria es inevitable y legítima. Resulta necesariamente del carácter represivo y armado del estado de clase. Constituye la única vía que conduce a la toma del poder político y económico y, a su ulterior defensa y fortalecimiento. Solo destruyendo el aparato burocrático y militar del estado burgués, puede consolidarse la revolución socialista.
3) Las formas pacíficas o legales de lucha (reivindicativas, ideológicas, electorales, etc.) no conducen por sí mismas al poder. El Partido Socialista las considera como instrumentos limitados de acción, incorporados al proceso político que nos lleva a la lucha armada. Consecuencialmente, las alianzas que el partido establezca sólo se justifican en la medida que contribuyen a la realización de los objetivos estratégicos ya precisados... La política de Frente de Trabajadores, se prolonga y se encuentra contenida en la política de la Organización Latinoamericana de Solidaridad, la que refleja la nueva
dimensión continental y armada que ha adquirido el proceso revolucionario latinoamericano. También plantea que en las actuales condiciones chilenas y latinoamericanas, el FRAP debe adecuarse en sus objetivos y organización a la línea general de la política de OLAS, y debe estar destinado a convertirse en el Frente Político que una a todas las fuerzas antiimperialistas revolucionarias que luchen consecuentemente por la revolución socialista... No hay posibilidad de transformación social total del sistema actual, sin salto cualitativo, sin destrucción de la actual constitucionalidad y construcción de una nueva bajo el imperio de la lucha armada... En América Latina, a la OEA debemos oponerles OLAS. Para el Partido Socialista, OLAS es más que una mera institución de solidaridad” Congreso PS, Chillan, 1967

«No podemos caer en la ingenuidad de creer que podemos construir el socialismo a través de las actuales instituciones y de las veinte mil leyes que existen. Sostener que la actual correlación de fuerzas puede dar lugar a un largo desarrollo, estable y tranquilo, no es solo una ingenuidad sino que es una posición reformista y aventurera [...]. Para los revolucionarios la solución no está en esconder o negar el objetivo de la toma del poder y del socialismo, sino en educar y preparar a las masas para lograrlo; si la revolución implica un tránsito violento en cualquier etapa, lo correcto no es negar la revolución a nombre del “menor costo”, sino enfrentar la violencia organizadamente, que es la única forma en que el pueblo (sic) sufre menos y el costo social es menor» (Pleno Nacional del Partido Socialista, marzo de 1972).



JOSE ANTONIO VIERA GALLO. SUBSECRETARIO DE JUSTICIA DE ALLENDE.

«Algunos han pretendido que el segundo camino hacia el socialismo excluye la dictadura del proletariado y han buscado amparo en las palabras presidenciales. Ésta ha sido una vieja pretensión que en los hechos ha sido infecunda». Y en relación a táctica a seguir: «la intimidación consiste en la acción de amenazar –directa o indirectamente– al adversario con un mal futuro posible, a fin de provocar una conducta determinada de su parte. Como alguien dijo, ha habido revoluciones que fracasaron porque tuvieron miedo de infundir miedo en sus enemigos. El miedo desarma: hay momentos en que el poder revolucionario puede legítimamente utilizar la intimidación» (José Antonio Viera-Gallo Q., Subsecretario de Justicia de Allende: en «El segundo camino hacia el socialismo», en Ceren nº 15, número especial sobre Revolución y Legalidad, Universidad Católica de Chile, 1972, p. 160).



JAIME GAZMURI, SECRETARIO GENERAL DEL MAPU.

“si algo nos enseña, compañeros, la historia de la lucha de clases, es que la derecha tiene una enorme capacidad de recuperación, es que la derecha mantiene hoy, todavía, una inmensa cuota de poder en nuestro país, y que están usando ese poder para intentar, incluso en las actuales condiciones, derrocar al Gobierno Popular y por eso hoy día, a nuestro juicio, el movimiento popular, aprovechando el enorme respaldo de las masas, la fuerza del Gobierno, el poder del pueblo, tiene que ponerse en pie de combate y avanzar acelerada y decididamente hacia un objetivo fundamental en este período histórico, hacia la conquista del poder... No se conquista el poder si en los momentos decisivos, cuando la lucha de clases en Chile se hace cada vez más intensa, cuando cada vez queda más claro que esta lucha es a muerte, la clase obrera no es capaz de darse una dirección única, un mando único para enfrentar la guerra, una perspectiva estratégica y táctica lo más común posible” Jaime Gazmuri, MAPU


JUAN BOSCO PARRA, Diputado Izquierda Cristiana.
“La Unidad Popular sabe que la única posibilidad de restablecer el orden del país es mediante el control total a través de una dictadura a nivel de quien ostenta el mando. La Unidad Popular no esconde su decisión de implantar la dictadura del proletariado. Está claro que una expresión de esta decisión es la orden de la CUT para que los obreros se tomen todas las industrias, las que no serán devueltas a sus dueños. Esta actitud agresiva de la Unidad Popular, asumida con audacia y valentía ha servido para poner en evidencia que la oposición no existe. ¿Dónde están los que hablan de la defensa de la democracia y la institucionalidad, si no se han atrevido a salir en defensa de sus bienes?... En relación a las Fuerzas Armadas hay tres alternativas: a) conseguir su adhesión al proceso, lo que no es posible por ahora, b) dividirlas, mediante infiltración, mejoramiento de rentas, halagos, etc. c) enfrentarlas, lo que será, con seguridad, la alternativa más cierta. El enfrentamiento no es posible por ahora. Se requerirá un proceso de dos años de preparación, para importar armas desde Cuba y para adiestrar a las milicias populares” Bosco Parra, IC



TAREAS DE COMITES DE LA UNIDAD POPULAR.

«Los Comités de la Unidad Popular deben prepararse para la defensa de la región geográfica en la que les corresponde actuar. Deben plantearse, por lo tanto, tareas de tipo militar. La directiva del comité, sin que lo sepan necesariamente todos sus miembros, deberían hacer un fichaje de todos los instrumentos técnicos de que se dispone. Deberían destacar un grupo dentro del comité, el más decidido y de mayor iniciativa, para las tareas directamente militares. El resto del comité debería desempeñar una tarea de vigilancia constante del sector en que les corresponde actuar» («Tareas de los Comités de la Unidad Popular», Punto Final nº 115, 13 de octubre de 1970).



JOSE ORLANDO MILLAS, Diputado PC.

Condujimos a muchachos, jóvenes militantes del Partido Comunista para que fueran preparados militarmente en Cuba, conduciéndolos posteriormente a quemarse en Chile en batallas imposibles y no tenemos derecho a criticarlos porque somos los que asumimos la responsabilidad, estremecedora, de plantearles, siendo adolescentes, que el camino para ser dignos de su pueblo debería recorrerse empuñando las armas"


Andrés Pascal Allende a la revista Punto Final: “Nosotros los clandestinos estábamos en contacto con el Presidente Allende desde 1969 a través de su hija Tati. Su hermana Laura, mi madre, nos daba ayuda, refugios secretos y nuevos reclutas para el MIR”.

Mónica González Mujica: “A fines de 1970 y cuando Salvador Allende ya había sido elegido Presidente, fuimos escogidos para partir a La Habana por seis meses para entrenarnos y estar así preparados para defender al Gobierno en el caso que se desatara una embestida golpista. Éramos quince: cinco del Partido Comunista, cinco del MIR y cinco del Partido Socialista.






DOCUMENTOS HISTÓRICOS IMPRESCINDIBLES:

  • Declaración conjunta del Presidente del Senado y del Presidente de la Cámara de Diputados, declarando ilegal el gobierno de Allende, de 08 de Julio de 1973.
  • Acuerdo de la Camara de Diputados de 22 de Agosto de 1973, en la cual se declara ilegal el gobierno de Allende.
  • Resolución de la Corte Suprema de fecha 26 de Junio de 1973, en la cual se declaran las ilegalidades cometidas por el gobierno de Allende.
  • Declaración del Colegio de Abogados declarando el quiebre del ordenamiento jurídico, de fecha 08 de Agosto de 1973.
  • Declaración del Colegio de Abogados, legitimando el derrocamiento del gobierno de Allende. Octubre de 1973.
  • Dictamen de la Contraloría que rechaza el decreto de Allende que pretendía promulgar solo parcialmente reforma constitucional sobre áreas de la economía, 02 de Julio de 1973.
  • Declaración oficial del Contralor General de La República, 08 de Agosto de 1973, objetando actuaciones de Allende.
  • Entrevista a ex presidente Eduardo Frei Montalva, realizada por el periodista Luis Calvo, publicada en el diario español ABC el 10 de octubre de 1973.
  • Carta de Eduardo Frei Montalva a Mariano Rumor, Presidente de la Unión Mundial de la Democracia Cristiana. 08 de Noviembre de 1973

Todos los documentos están en el siguiente pdf:
https://www.mediafire.com/file/5n4qm04w29ja1of/DOCUMENTOS+HISTORICOS+1973.pdf/file
Recomiendo sobre todo el documento N° 5, que es la declaración del Colegio de Abogados legitimando el derrocamiento de Allende, en donde se argumenta con una finesa intelectual sublime.
 
la única duda que tengo es cuántos locales, paraderos, micros, semáforos, iglesias y señaléticas van a destruir los perros bomba

los culiaos juran que las weas se consiguen llorando y destrozando lo ajeno (tal niño malcriao' y envidioso)
la familia de estos weones jamas ha emprendido algo o algun cercano, siempre miran la wea con resentimiento y envidia sin tener idea de los esfuerzos y el trabajo que hay detrás

weones mediocres
 

DALE, DALE PINOCHET, LA CALDERA VA A ESTALLAR,
LAS MENTIRAS DE MOSCÚ, EL MUNDO CONOCERÁ.

EN UN 11 DE SEPTIEMBRE, CHILE DESPERTÓ A LA AURORA,
DE UNA NOCHE DE TRES AÑOS, REFRESQUEMOS LA MEMORIA,
COMO ESCLAVOS DE MOSCÚ, NOS QUERÍAN DEJAR MARCADOS,
GUERRILLEROS EXTREMISTAS, REGALOS DE FIDEL CASTRO.

CON LA HOZ Y EL MARTILLO, REEMPLAZARON NUESTRO EMBLEMA,
Y AL TRABAJO Y AL ESTUDIO, CON METRALLAS Y CADENAS.

NO TRABAJABAN LA TIERRA, NADIE MOVIÓ LAS INDUSTRIAS,
Y LAS COLAS FUERON MODA, HAMBRE, MIEDO Y MUCHA ANGUSTIA.

HASTA QUE EL ‘73 VOLVIÓ A FLAMEAR MI BANDERA,

ESA ROJA, AZUL Y BLANCA, Y EN EL AZUL UNA ESTRELLA.

DALE DALE PINOCHET, LA CALDERA VA A ESTALLAR,

LAS MENTIRAS DE MOSCÚ, EL MUNDO CONOCERÁ.
 
Cambiaron el titulo


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