juan camino
Hincha Huevas
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Empresario indio vende vuelos que nunca despegan
Un genial emprendedor de la India con el nombre de Bahadur Chand Gupta posee un negocio único: vender pasajes para abordar vuelos en avión… que nunca despegan.
La idea parece estúpida en estos lugares del mundo, ¿por qué alguien querría subirse a un avión que nunca se mueve un milímetro? La respuesta es sencilla para quienes conocemos el país oriental, pues la India tiene un ingreso per cápita muy bajo y sólo el 1% de su población ha abordado un avión real, y muchos representantes del otro 99% quieren conocer la sensación aunque carezca de objetivo final.
La idea nació cuando Bahadur se retiró como ingeniero de Indian Airlines y el 2003 compró un Airbus 300 (al que le falta un ala y un pedazo de cola) perteneciente una empresa de seguros.
El viaje tiene un costo de US$4 (2.000 CLP | 2,8 € | 43,6 MXN) y trata de ser lo más fiel posible a la versión real, e incluye el típico curso de “en caso de emergencia…”, una clásica comida de avión servida por seis azafatas e incluso alertas de turbulencia y de proximidad al aterrizaje por parte del propio Bahadur, que también se las da de capitán.
Uno de los pasajeros de esta curiosa línea aérea, una joven profesora, dijo luego de bajarse del avión que “ha sido más hermoso de lo que había podido imaginar”.
Fuente
Un genial emprendedor de la India con el nombre de Bahadur Chand Gupta posee un negocio único: vender pasajes para abordar vuelos en avión… que nunca despegan.
La idea parece estúpida en estos lugares del mundo, ¿por qué alguien querría subirse a un avión que nunca se mueve un milímetro? La respuesta es sencilla para quienes conocemos el país oriental, pues la India tiene un ingreso per cápita muy bajo y sólo el 1% de su población ha abordado un avión real, y muchos representantes del otro 99% quieren conocer la sensación aunque carezca de objetivo final.
La idea nació cuando Bahadur se retiró como ingeniero de Indian Airlines y el 2003 compró un Airbus 300 (al que le falta un ala y un pedazo de cola) perteneciente una empresa de seguros.
El viaje tiene un costo de US$4 (2.000 CLP | 2,8 € | 43,6 MXN) y trata de ser lo más fiel posible a la versión real, e incluye el típico curso de “en caso de emergencia…”, una clásica comida de avión servida por seis azafatas e incluso alertas de turbulencia y de proximidad al aterrizaje por parte del propio Bahadur, que también se las da de capitán.
Uno de los pasajeros de esta curiosa línea aérea, una joven profesora, dijo luego de bajarse del avión que “ha sido más hermoso de lo que había podido imaginar”.
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IDOLO
