No es primera vez que estalla una fábrica que trabaja con materiales concentrados altamente explosivos en/cerca de la ciudad.
El debate no debería ser sobre terrorismo, si no, la regulación para que ese tipo de empresas se encuentren en lugares totalmente aislados.
Una lástima por la cantidad de muertos y los dañados por la onda expansiva, una real paja
Encima con la pandemia y la economía débil peor aún
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