Nunca había visto tal mediocridad en una campaña persidencial. Tampoco nada de autocrítica respecto al mal gobierno del oficialismo, ayer con toda soltura y sin pudor, el ministro de hacienda tirando mierda a SP, porque las platas no daban para llevar a cabo su programa. Wn eso es ser cara de raja nivel Dios, un gobierno que planteó mal una reforma tributaria, dineros que en sus mentes estarían y que al final no fue así, no tienen cara para siquiera osar críticar al contrario.