Unrrwtoi
Hincha Huevas
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¿Se acuerdan de ese vídeo donde Piñera nos invitaba a "tomarnos nuestro país..."? Un hecho curioso, por decirlo menos.
Pues bien, aquí les traigo otra curiosidad: un publicista hablando de ética.
Léalo Ud. mismo:
Pues bien, aquí les traigo otra curiosidad: un publicista hablando de ética.
Léalo Ud. mismo:
Kidzania No Es Un Juego De Niños
En este preciso momento, en varios malls repartidos por el mundo, hay miles de niños vestidos como pilotos volando aviones digitales desde cabinas simuladas, entregando noticias desde un estudio de televisión o usando un casco de bombero para apagar un incendio en Kidzania. Esta es una cadena multinacional, que desarrolla ciudades a escala para niños (un híbrido entre el MIM y Fantasilandia), y en donde estos juegan a ser profesionales, juegan a ser adultos… Pues bien, uno de estos centros de entretención familiar se acaba de inaugurar en el Parque Araucano de Las Condes, unos de los pocos pulmones verdes de la capital.
Más allá de lo divertido que resulta para padres y niños tener todas las marcas y servicios de una sociedad de consumo en un espacio urbano reducido y lúdico; en el corazón del concepto Kidzania está inserto el consumismo representado por las marcas auspiciadoras de las distintas actividades económicas presentes en la ciudadela. A su vez, la campaña publicitaria de Kidzania posiciona el concepto de "Aprende mientras juegas", afirmando la franquicia que la "diversidad de experiencias de aprendizaje de Kidzania beneficiará a los niños en su vida escolar, en casa o cuando están fuera con los amigos." Beneficios del todo discutibles como veremos más adelante.
La misión corporativa de Kidzania indica que la compañía y sus franquicias (marcas) trabajan para "proporcionar el mejor entretenimiento educativo para la familia a través de la diversión y el juegos de roles en actividades realistas." Esto es genial, porque el juego de roles es algo que los psicólogos del desarrollo del niño cada vez lo consideran más como una forma efectiva para mejorar la concentración y pensamiento claro de los chicos. El desarrollo de esta autorregulación a una edad temprana puede incluso ayudar a los niños a crecer intelectualmente, pudiendo ser un buen indicador de la capacidad académica futura inclusive…pero, el juego de roles que propone Kidzania es muy reducido.
Cuando la tienda de comestibles o el restaurante están totalmente equipados, no hay lugar para que el niño pueda generar algo más. Los estudios de mercado entre peques de 9 a 12 años nos señalan que estos están cada vez ocupando menos su tiempo en juegos libres y desestructurados (CREATIVIDAD). De este modo, es poco lo imaginario, y las actividades lúdicas giran en torno a seguir las instrucciones de los adultos en Kidzania, eliminando así los beneficios del juego y la creación de nuevos mundos. En definitiva, los niños no crean sus propias historias en Kidzania, replican las historias del mundo adulto.
Por último, los chicos ya están expuestos a todo tipo de productos, campañas y marcas, dejando así muy poco espacio para su imaginación por una parte, y por la otra, fortaleciendo la dependencia que tienen de las marcas para divertirse. Que lástima, este parque de “entretenciones” está cooperando en la formación de una nueva generación de consumidores chilenos materialistas y voraces, egoístas como nosotros los adultos. Después de todo, no es un juego de niños.
Cristián Leporati
Director de la Escuela de Publicidad y profesor asociado de la Universidad Diego Portales.
Publicista con Postítulos en: Dirección de Marketing, Escuela de Alta Dirección y Administración de Empresas, Barcelona – España; Marketing Internacional en la Universidad de Chile, Magíster en Humanidades, mención filosofía, Universidad Adolfo Ibáñez y candidato a Magíster en Antropología Urbana de la UAHC.
Fuente: "Kidzania no es un juego de niños" http://blog.latercera.com/blog/cleporati/