McKamey Manor, así se llama la casa de terror más extrema del mundo que destaca Adictivo365.com. Se encuentra en San Diego, California, y se dice que nadie ha podido terminar el recorrido. Nada de personas con una sabana blanco encima y telas de araña, aquí hay un trabajo mucho más desarrollado.
Para ingresar a esta terrorífica película hay que firmar un acuerdo en el que aceptas que no podrás salir a menos que se presente una condición extrema en donde tu integridad física y mental se vea peligro. De hecho hay profesionales que verifican la continuidad de las personas. El tour hace hincapié en que no es apto para personas menores de 21 años, embarazadas, y con problemas del corazón.
El recorrido de McKamey Manor puede ser de 4 horas, ese es el promedio, pero hay uno más intenso que dura alrededor de siete horas. Existe una lista de espera de más de miles personas para participar de esta experiencia, por lo que hay que enviar una solicitud a través de su página web. Cada recorrido se hace solo en grupo de 2 a 4 personas y es uno por día.
La experiencia incluye interacción con monstruos de la casa, los cuales te pueden tocar, pero tú a ellos no. El juego también implica tener contacto con 'vómito¿, 'sangre', y fluidos que quién sabe qué son.
Para ingresar a esta terrorífica película hay que firmar un acuerdo en el que aceptas que no podrás salir a menos que se presente una condición extrema en donde tu integridad física y mental se vea peligro. De hecho hay profesionales que verifican la continuidad de las personas. El tour hace hincapié en que no es apto para personas menores de 21 años, embarazadas, y con problemas del corazón.
El recorrido de McKamey Manor puede ser de 4 horas, ese es el promedio, pero hay uno más intenso que dura alrededor de siete horas. Existe una lista de espera de más de miles personas para participar de esta experiencia, por lo que hay que enviar una solicitud a través de su página web. Cada recorrido se hace solo en grupo de 2 a 4 personas y es uno por día.
La experiencia incluye interacción con monstruos de la casa, los cuales te pueden tocar, pero tú a ellos no. El juego también implica tener contacto con 'vómito¿, 'sangre', y fluidos que quién sabe qué son.
Hay unos peores que son unos galpones llenos de "refugiados" deseosos de sexo y de plata,