Primero que nada, todo este tipo de noticias ha de tomarse con pinzas, porque se trata de un
relato de una
extranjera. Parece que exacerban todo lo que diga una extranjera, y más si se trata de estos menesteres, que colocan al chileno como si fuera lo peor.
Supongo que no saben o no han visto la realidad a las afueras de la oficina de extranjería en Antofagasta, con filas interminables de colombianos, que muchas veces pasan las noches ahí. Venden comida y hacen su vida a las afueras, todo a vista y paciencia de los ciudadanos, en el centro de la ciudad. La culpa la tiene tanto el gobierno como el municipio, porque esta inmigración es irresponsable en todo sentido, y no le han querido colocar atajo. Se abren las puertas a la llegada de esta gente en masa, pero no se planifica nada en el ámbito burocrático y de su propia sostenibilidad, osea lleguen y se las arreglan como puedan.
Ahora, volviendo a la susodicha, me gustaría saber de qué tendencia política es. Seguro que se trata de una subnormal, cata corontas negras de la arena. Estamos hablando de España, el Perú europeo, uno de los países que trata peor a los chilenos.
Hija de puta, anda a hablar mierda a tu país.