Como el pelambre se hace entre el personal, los pacientes nunca llegan a enterarse de lo que se dice sobre ellos. Para quienes trabajan en el mismo recinto el tema es doblemente jodido, ya que en una emergencia obviamente uno será visto en primera instancia ahí mismo. Por ende, uno de los mandamientos es usar ropa interior limpia y decente, además de estar depilado/con rebaje y cuidar la higiene genital. Es bien feo cuando se escucha "¿supiste que X tenía un bóxer lleno de hoyos?", "el otro día se supo que la X no se depila y tiene la media selva" o "estaba todo cagado".
gran verdad