Estoy de acuerdo, a modo general, con el análisis que realizas. El Frente Amplio se posicionó fuerte luego de estas elecciones; 21 diputados y un senador son muestra clara de ello.
También es cierto lo que mencionas dobre la DC, ese partido - para alegría de varios - quedó destruido. Por otra parte, creo que otro gran perdedor fue la NM y no la derecha. Si bien la derecha se aglutinó en dos candidatos (Piñera y Kast) mostrando un retroceso en el apoyo a Piñera, se evidenció un significativo aumento en el votó que respaldó al independiente Kast. Además, no quedaron mal parados en la elección de diputados y senadores.
Creo que el único y gran perjudicado es el bloque de izquierda que representa la NM, perdieron varios escaños parlamentarios, muchos de ellos con figuras históricas de su bancada. Esto se vio reflejado de igual manera en la votación que respaldó a Guillier que sólo superó por poco más de 120.000 - 150.000 (?) votos a la nueva fuerza política encarnada en el Frente Amplio. ¿QUé significa esto? Pues, en términos simples cambia el panorama de negociación de las izquierdas chilenas. En un principio se daba por hecho que sería el FA impulsado por RD quienes coquetearían con la NM para acceder a alguna pequeña cuota de poder. Por el contrario, lo que deja las elecciones es una situación inversa en la que será la NM quien deberá ceder terreno en aras de un hipotético apoyo en segunda vuelta, eso al menos en la carrera presidencial.
El FA se instaló con fuerza como LA alternativa de izquierda para el corto y mediano plazo en desmedro de la NM. La fuerza progresista es mayoría, pero es inconstante en su participación cívica. La gran pugna política que se viene es entre la izquierda para ver qué grupo se erige como la oposición natural de la derecha: la añeja política de la NM, o el progresismo neoliberal del FA.
