1. Que se dediquen 100% (o al menos 70%) al wrestling. Ser oficionista de 9 a 18 y en las tardes wrestler te mata la "carrera" (
XL que se lanzó a la vida a vivir de esta weá por el mundo).
2. Micrófono es lo otro que les falta. No por una weá al estilo WWE para que salga y llene el espacio sin necesidad de pelear, sino porque tener micro te ayuda a seguir storylines, por ejemplo, antes de cada combate o, por último, te sirve para prender al público más allá del carisma que se pueda tener solo por "presencia" (ahí es que le rescato la weá a Ariel Levy... que él sí tiene micro).
3. Más práctica sobre el ring. Hay casos que son notables (Coyote o el mismo Montoya), pero en general el luchador local no es muy prolijo en los movimientos y muchas veces solo cae en el "spotfest" para presentar un combate sobre el ring. A lo anterior le agrego que muchas historias tratan de vender una "historia" sobre el cuadrilatero, pero no les sale (algo que Levy "sí puede lograr"... en algunas ocasiones).
4. Un wn que cache de lucha que dirija la empresa. Huguito es en parte ese hombre (salvo por el error culiao de tener a
La pantera ecuatoriana sobre el ring) que sabe del negocio y que podría armar algo bonito acá en Chile. Lamentablemente, el wn solo está de paso para sacar unas lucas y ya. Como dije en otro tema... Wrestling Superstar no creo que pase del 2017.