Kititta
Exiliado
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Seguimos con la historia de la familia de mi viejo...
Mi papá recorrió distintas localidades en el sur, por las fotos que tiene y las historias que cuenta estuvo en Puerto Montt, Puerto Williams y varias Islas que servían de base militar en la frontera con Argentina. Estuvo dos años, periodo en el cual se mandaba cartas con mi mamá que estaba en Concepción. En ese lapso de tiempo sus hermanas se empezaron a ir de la casa, y como mi papá es el menor de 5 hijos del segundo matrimonio de mi abuela, era el que iba quedando en la casa. Ya sabemos que mientras estuvo en el servicio le tocó vivir varias weas que ni el mismo sabe cómo describir.
En la casa, las cosas no andaban muy bien de plata, o sea siempre habían estado cagados, pero nunca a ese nivel. Mi abuelo ya estaba enfermo, no podía ir a hacer fletes con el carretón y el copete lo tenía muy cagado, como los hijos se iban a hacer su vida empezaron a arrendar las piezas de la parte de atrás de la casa, para tener un ingreso extra.
Una de mis tías nos contó que había un cabro que arrendaba una pieza y que nunca había sentido ningún boche ni nada raro, solo a los perros llorar de vez en cuando, cosa que el encontraba normal. Un día lo invitaron a un cumpleaños en la casa de mis abuelos, y como era costumbre mis tios empezaron a hacer la ouija. Este cabro no creía y se reía pensando que eran ellos los que movían el vaso con los dedos. Empezaron a preguntar weas y a alguien se le ocurrió decirle a la ouija si es que podía venir algún espíritu a decirle a este cabro que los fantasmas eran de verdad. Como estaban todos cagados de la risa y curaos nadie pescó realmente y siguieron en lo suyo. El cabro se quedó dormido en el sillón y lo taparon, todos se fueron a acostar. Según cuenta este cabro, en la noche sintió pasos bajando por la escalera, pero entre la curadera le dio lo mismo, pensó que alguien bajaba al baño, pero, los pasos se acercaron hasta el sillón, eran pasos de hombre porque eran pesados y hacían crujir el suelo de madera, y sea lo que haya sido se paró al lado del sillón y empezó a apretarlo, entre la desesperación y el miedo no le salía la voz, hasta que la wea desapareció, ahí recién se puso a gritar y llorar. Bajaron todos y el preguntó quién le había ido a pegar, y resulta que nadie bajo hasta que escucharon los gritos de este cabro. Dice mi tía que nunca más entró a la casa de nuevo.
Cuando mi viejo todavía iba al liceo (1984-1985 aprox), y mientras hacían la ouija se aparecieron dos espíritus que se alternaban para responder las preguntas. Por lo que decían, se llamaban Susuru (o Susumu, mi viejo no se acuerda bien) y Emiru, no tenían un sexo definido y decían que no estaban muertos. ¿Pero si no estaban muertos cómo estaban en la ouija? Ellos decían que estaban en otro lugar, que era como otra dimensión que ellos no iban a entender. Igual estaban todos extrañados por lo raro de los nombres y porque eran diferentes a los espíritus comunes y corrientes que aparecían y a los tres días de haberle rezado se iban. Estos eran como más inteligentes, y tenían como una conexión media cuática con mi viejo, era con quién más interactuaban. Dentro de las cosas que le preguntaron era de que si existían los ovnis o era puro invento, y ellos decían que de dónde ellos venían si habían otros seres humanos, que ellos eran del futuro.
Dentro del webeo, mi tía, a la misma que le pasó esta wea de que alguien le abrió la puerta a media noche le pasó otro numerito (-digámosle Karen), y cada vez que alguien le presunta sobre las cosas que le pasaron en la casa se enoja y se persigue caleta. Ella le dijo a los “marcianos” que si era verdad que ellos eran del futuro u otro planeta se lo mostraran que ella no tenía miedo. Ellos le respondieron que no porque sabían que ella se iba a asustar, pero mi tía insistió. Se fue a acostar y esperó en la pieza y no
pasó nada. Después se fue a acostar mi otra tía, porque compartían pieza. Aprox, entre los 2 o 3 A.M mi tía sintió que se abrió una puerta y una luz –creo que como un orb- entró y se posó justo en la cabeza de mi tía Karen que estaba durmiendo, y empezó a tener pesadillas. Su hermana estaba cagá de miedo y agarró fuerzas para encender la luz y la despertó. Mí tía, entre llantos que despertó a medio mundo, dijo que se soñó con dos weones altos y blancos, pálidos y casi transparentes que le habían agarrado la cabeza con una mano gigante como tratando de agarrarla y le decían: -Viste, te dijimos que te íbamos a asustar. Después de eso no los llamaron más.
Otra anécdota que les ocurrió con estos tipos fue que le dijeron a mi papá que si necesitaba ayuda los llamara. Según mi viejo, en dos oportunidades les pidió ayuda y salió ileso, una de ellas fue de un asalto y la otra de un problema que tuvo en el liceo de la que igual salió ileso al pedirle ayuda al “Susuru”.
Yo siempre me he cuestionado esta historia, no porque no crea que haya ocurrido, sino porque si es verdad que estos weones no estaban muertos y se comunicaban con personas en otras épocas, significa que los humanos si descubrieron o descubrirán alguna forma de ingresar a otros planos, o enviar ondas de radio en otras frecuencias. Quizá la humanidad no esté tan cagada más adelante y si progresemos como especie. Además en esa época que con cuea tenían una tele y eran más pobres que la mierda, ¿Cómo pudieron conocer o saber unos nombres que claramente son japoneses? Estamos hablando de Conce a mediados de los 80 en una pobla que estaba en medio de una laguna y una toma y de una familia que vivía con lo que les daba un carretón.
Con el correr del tiempo las cosas se fueron normalizando, ya no hacían tanto la ouija, mis tias se fueron casando, mi papá pololeaba con mi mamá y después se fue al servicio militar. Pero en medio de ese tiempo también ocurrieron otras weas como que la “Laura” que era esta vieja responsable de dejar la cagá en la casa y que según ella no tenía nada que ver con ellos, sólo pasó por la casa y se quedó ahí, seguía webiando a la gente que era cercana a la familia, mi mamá también fue testigo de algunas cosas que les contaré más adelante.
Un día mi abuelo quiso emparejar el patio de tierra) porque aparte de ser pobres tenían perros y conejos que hacían hoyos en la arena) y cuando empezó a escarbar de un lado para echar la tierra en los hoyos encontró una cruz de madera, ya no quedaba casi nada excepto la unión entre la cruz. Era una cruz de cementerio, de esas que les colocan a las tumbas repobres en los patios comunes. Mi abuelo echó unas chuchás y después la botó, en realidad nadie indagó si realmente esa cruz era la causante de que ocurrieran weas en la casa o si había algo más enterrado más abajo.
El hermano mayor de mi viejo, ese que siempre le pedía un pacto al diablo para tener plata, tuvo una hija, la que cuidaba mi abuela. A ella igual le pasaban weas en la casa, siendo que eran una pendeja de 4 o 5 años, no recuerdo muy bien la historia pero varias veces la escuchaban hablando con amigos imaginarios, nadie pescaba hasta que vieron a un viejo chico esconderse detrás del sillón y desaparecer, quedó la casa de putas. Cuando vaya a mi ciudad linda y bella le preguntaré bien a mi viejo cómo fue esa historia porque me la contaron hace tantos años que ya no me acuerdo. También pasó que para el cumpleaños de mi prima, estaban todos los niñitos cantando y en el momento del deso todos se quedaron callados y se sintió como si tiraran un puñado de tierra al techo, y como era de lata se escuchó en toda la casa, lo cuático era que esa era la casa más alta del sector y no había nadie en el patio ni en la calle a esa hora.
En una de las andanzas de mi viejo en Santiasko, visitando a unos primos en San Bernardo. Empezaron con la weaita de invocar a los espíritus, ya todos cachaban que hacía años que estaban metidos en eso, así que querían cachar si era puro cuento o no. Jugaron un buen rato, hasta que llegó su tía y los echó a acostar, como los pillaron de improviso mi papá no alcanzó a echar al espíritu y quedó dando vueltas en la casa. La tía sintió un boche y salió a mirar al patio. A los minutos pega un grito y justo cuando llegaron a la puerta para ver qué pasaba sintieron un aleteo, así como de una gallina, y vieron a la tía entrar pálida, blanca como papel. Le preguntaron qué había pasado y ella dijo: -Nada, era un gato no más, éntrense cabros de mierda. Pero todos sintieron el aleteo, no fue nada un gato.
En la noche los hombres se separaron de las mujeres y las minas durmieron en una pieza y los hombres en otra. Estaban durmiendo y uno de los primos de mi viejo sintió a alguien caminado por el pasillo hacia su pieza, pensó que era una de sus hermanas y no pesco, entraron a la pieza de los hombres y cuando éste weón miró cachó que era un weon robusto, un hombre, siendo que los únicos hombres de la casa estaban en esa pieza, el weón transpiraba y transpiraba, dice mi viejo que dejó las sábanas mojadas, le pegaba patadas al hermano que estaba durmiendo en la misma cama y el hermano también estaba despierto, los dos cagados de miedo. Como la cama estaba a baja altura y estos weones no se querían ni mover no le vieron la cara, sólo que el weón entró, se paró justo en su cama y después salió de la pieza. Fueron a despertar a mi papá y resulta que los tres weones estaban despiertos y vieron al weón entrar a la pieza, prendieron las luces y en la casa no había nada, ni los perros ladraron ni las minas estaban despiertas a esa hora. La tía tuvo que hacer una limpieza con ruda al otro día.
Una wea que le pasó a mis viejos fue que mi mamá quedó embarazada de mi hermano, así que como se hacía en esa época había que casarse aunque vivieran pobres, así que se fueron a vivir a una pieza de las que tenían mis abuelos en arriendo. En esa época mi abuelo ya estaba muy cagado de salud, y vivió sus últimos años en cama. Mi abuelo siempre decía que veía weas en la pieza, pero como ya su enfermedad lo hacía delirar por ratos nadie podía hacer nada ni tampoco perseguirse con las cosas que decía. Mis viejos tenían su pieza que al mirar hacia afuera por la ventana, se veía la ventana de mi abuelo, y entre medio un patio de tierra en el que jugaban los perros mierderos que tenían y que dejaban el patio lleno de caca, según mi mamá recuerda.
Mi abuelo comenzó a llorar y llamar a mi papá y a mi abuela, y mis viejos escucharon unos golpes como cuando alguien toca la puerta, pero cuando bajaron no había nadie y mi abuelo seguía postrado en la cama, según mi abuelo alguien venía a buscarlo y molestarlo y le golpeaba la ventana. Mi viejo trató de no perseguirse tanto (a esas alturas él y su hermano que estaba separado, eran los únicos hijos que quedaban en la casa y ya no hacían la ouija) Y subió a la pieza con mi mamá. De nuevo sintieron al viejo quejándose y el golpeo al vidrio, mis viejos salieron a mirar por la ventana, y vieron que no había nadie pero seguían golpeando el vidrio, y el viejo dentro llorando, mi mamá confirma esta wea (a todo esto mi mamá tiene su propia historia con weas de fantasmas, pero nunca la cuenta porque es una historia super dolorosa). En el año 1990 nací yop mi abuelo murió un mes después, siempre me viene a ver en sueños cuando quiere algo, avisa algo o quiere que lo vayan a ver al cementerio. Todos mis tios que han soñado con el siempre dicen que el me cuida, quizá por eso a mi no me pasa ninguna wea, a diferencia del resto de mi familia. Es curioso que cuando era chica ya conocía su cara a pesar de que nunca lo vi en fotos hasta que ya era grande, y no tenía conciencia como para recordarlo al tener un mes de vida.
Otra wea que le pasó a mi viejo ya casado en esa casa es que sintió boches en la pieza de al lado, fue a mirar, y no había nada. Cuando volvió a su pieza le habían sacado la ventana completa, con marco, vidRios y todo. Ya no estaba, desapareció en un par de segundos, sin ruidos ni golpes, y la encontraron dos cuadras más abajo en la calle.
Por esta sesión es sólo eso, para la próxima les voy a detallar qué fue lo que pasó con la casa, con mi abuelita y cómo los hijos y los nietos de alguna forma seguimos ligados a esas weas paranormales, sobretodo el gordo antronero de mi hermano, wea que sueña wea que pasa (no es @HITMAN).
PARTE I:
http://www.antronio.cl/threads/la-f...i-abuelos-y-bisabuelos.1250812/#post-22976540
PARTE II:
http://www.antronio.cl/threads/la-familia-de-mi-viejo-parte-ii-“sesión-de-espiritismo”.1251087/
PARTE III:
http://www.antronio.cl/threads/la-familia-de-mi-viejo-iii-parte-fuera-de-la-ouija.1251636/
PARTE V
https://www.antronio.cl/threads/la-familia-de-mi-viejo-parte-v-heredados.1287002/#post-24356467
Mi papá recorrió distintas localidades en el sur, por las fotos que tiene y las historias que cuenta estuvo en Puerto Montt, Puerto Williams y varias Islas que servían de base militar en la frontera con Argentina. Estuvo dos años, periodo en el cual se mandaba cartas con mi mamá que estaba en Concepción. En ese lapso de tiempo sus hermanas se empezaron a ir de la casa, y como mi papá es el menor de 5 hijos del segundo matrimonio de mi abuela, era el que iba quedando en la casa. Ya sabemos que mientras estuvo en el servicio le tocó vivir varias weas que ni el mismo sabe cómo describir.
En la casa, las cosas no andaban muy bien de plata, o sea siempre habían estado cagados, pero nunca a ese nivel. Mi abuelo ya estaba enfermo, no podía ir a hacer fletes con el carretón y el copete lo tenía muy cagado, como los hijos se iban a hacer su vida empezaron a arrendar las piezas de la parte de atrás de la casa, para tener un ingreso extra.
Una de mis tías nos contó que había un cabro que arrendaba una pieza y que nunca había sentido ningún boche ni nada raro, solo a los perros llorar de vez en cuando, cosa que el encontraba normal. Un día lo invitaron a un cumpleaños en la casa de mis abuelos, y como era costumbre mis tios empezaron a hacer la ouija. Este cabro no creía y se reía pensando que eran ellos los que movían el vaso con los dedos. Empezaron a preguntar weas y a alguien se le ocurrió decirle a la ouija si es que podía venir algún espíritu a decirle a este cabro que los fantasmas eran de verdad. Como estaban todos cagados de la risa y curaos nadie pescó realmente y siguieron en lo suyo. El cabro se quedó dormido en el sillón y lo taparon, todos se fueron a acostar. Según cuenta este cabro, en la noche sintió pasos bajando por la escalera, pero entre la curadera le dio lo mismo, pensó que alguien bajaba al baño, pero, los pasos se acercaron hasta el sillón, eran pasos de hombre porque eran pesados y hacían crujir el suelo de madera, y sea lo que haya sido se paró al lado del sillón y empezó a apretarlo, entre la desesperación y el miedo no le salía la voz, hasta que la wea desapareció, ahí recién se puso a gritar y llorar. Bajaron todos y el preguntó quién le había ido a pegar, y resulta que nadie bajo hasta que escucharon los gritos de este cabro. Dice mi tía que nunca más entró a la casa de nuevo.
Cuando mi viejo todavía iba al liceo (1984-1985 aprox), y mientras hacían la ouija se aparecieron dos espíritus que se alternaban para responder las preguntas. Por lo que decían, se llamaban Susuru (o Susumu, mi viejo no se acuerda bien) y Emiru, no tenían un sexo definido y decían que no estaban muertos. ¿Pero si no estaban muertos cómo estaban en la ouija? Ellos decían que estaban en otro lugar, que era como otra dimensión que ellos no iban a entender. Igual estaban todos extrañados por lo raro de los nombres y porque eran diferentes a los espíritus comunes y corrientes que aparecían y a los tres días de haberle rezado se iban. Estos eran como más inteligentes, y tenían como una conexión media cuática con mi viejo, era con quién más interactuaban. Dentro de las cosas que le preguntaron era de que si existían los ovnis o era puro invento, y ellos decían que de dónde ellos venían si habían otros seres humanos, que ellos eran del futuro.
Dentro del webeo, mi tía, a la misma que le pasó esta wea de que alguien le abrió la puerta a media noche le pasó otro numerito (-digámosle Karen), y cada vez que alguien le presunta sobre las cosas que le pasaron en la casa se enoja y se persigue caleta. Ella le dijo a los “marcianos” que si era verdad que ellos eran del futuro u otro planeta se lo mostraran que ella no tenía miedo. Ellos le respondieron que no porque sabían que ella se iba a asustar, pero mi tía insistió. Se fue a acostar y esperó en la pieza y no
pasó nada. Después se fue a acostar mi otra tía, porque compartían pieza. Aprox, entre los 2 o 3 A.M mi tía sintió que se abrió una puerta y una luz –creo que como un orb- entró y se posó justo en la cabeza de mi tía Karen que estaba durmiendo, y empezó a tener pesadillas. Su hermana estaba cagá de miedo y agarró fuerzas para encender la luz y la despertó. Mí tía, entre llantos que despertó a medio mundo, dijo que se soñó con dos weones altos y blancos, pálidos y casi transparentes que le habían agarrado la cabeza con una mano gigante como tratando de agarrarla y le decían: -Viste, te dijimos que te íbamos a asustar. Después de eso no los llamaron más.
Otra anécdota que les ocurrió con estos tipos fue que le dijeron a mi papá que si necesitaba ayuda los llamara. Según mi viejo, en dos oportunidades les pidió ayuda y salió ileso, una de ellas fue de un asalto y la otra de un problema que tuvo en el liceo de la que igual salió ileso al pedirle ayuda al “Susuru”.
Yo siempre me he cuestionado esta historia, no porque no crea que haya ocurrido, sino porque si es verdad que estos weones no estaban muertos y se comunicaban con personas en otras épocas, significa que los humanos si descubrieron o descubrirán alguna forma de ingresar a otros planos, o enviar ondas de radio en otras frecuencias. Quizá la humanidad no esté tan cagada más adelante y si progresemos como especie. Además en esa época que con cuea tenían una tele y eran más pobres que la mierda, ¿Cómo pudieron conocer o saber unos nombres que claramente son japoneses? Estamos hablando de Conce a mediados de los 80 en una pobla que estaba en medio de una laguna y una toma y de una familia que vivía con lo que les daba un carretón.
Con el correr del tiempo las cosas se fueron normalizando, ya no hacían tanto la ouija, mis tias se fueron casando, mi papá pololeaba con mi mamá y después se fue al servicio militar. Pero en medio de ese tiempo también ocurrieron otras weas como que la “Laura” que era esta vieja responsable de dejar la cagá en la casa y que según ella no tenía nada que ver con ellos, sólo pasó por la casa y se quedó ahí, seguía webiando a la gente que era cercana a la familia, mi mamá también fue testigo de algunas cosas que les contaré más adelante.
Un día mi abuelo quiso emparejar el patio de tierra) porque aparte de ser pobres tenían perros y conejos que hacían hoyos en la arena) y cuando empezó a escarbar de un lado para echar la tierra en los hoyos encontró una cruz de madera, ya no quedaba casi nada excepto la unión entre la cruz. Era una cruz de cementerio, de esas que les colocan a las tumbas repobres en los patios comunes. Mi abuelo echó unas chuchás y después la botó, en realidad nadie indagó si realmente esa cruz era la causante de que ocurrieran weas en la casa o si había algo más enterrado más abajo.
El hermano mayor de mi viejo, ese que siempre le pedía un pacto al diablo para tener plata, tuvo una hija, la que cuidaba mi abuela. A ella igual le pasaban weas en la casa, siendo que eran una pendeja de 4 o 5 años, no recuerdo muy bien la historia pero varias veces la escuchaban hablando con amigos imaginarios, nadie pescaba hasta que vieron a un viejo chico esconderse detrás del sillón y desaparecer, quedó la casa de putas. Cuando vaya a mi ciudad linda y bella le preguntaré bien a mi viejo cómo fue esa historia porque me la contaron hace tantos años que ya no me acuerdo. También pasó que para el cumpleaños de mi prima, estaban todos los niñitos cantando y en el momento del deso todos se quedaron callados y se sintió como si tiraran un puñado de tierra al techo, y como era de lata se escuchó en toda la casa, lo cuático era que esa era la casa más alta del sector y no había nadie en el patio ni en la calle a esa hora.
En una de las andanzas de mi viejo en Santiasko, visitando a unos primos en San Bernardo. Empezaron con la weaita de invocar a los espíritus, ya todos cachaban que hacía años que estaban metidos en eso, así que querían cachar si era puro cuento o no. Jugaron un buen rato, hasta que llegó su tía y los echó a acostar, como los pillaron de improviso mi papá no alcanzó a echar al espíritu y quedó dando vueltas en la casa. La tía sintió un boche y salió a mirar al patio. A los minutos pega un grito y justo cuando llegaron a la puerta para ver qué pasaba sintieron un aleteo, así como de una gallina, y vieron a la tía entrar pálida, blanca como papel. Le preguntaron qué había pasado y ella dijo: -Nada, era un gato no más, éntrense cabros de mierda. Pero todos sintieron el aleteo, no fue nada un gato.
En la noche los hombres se separaron de las mujeres y las minas durmieron en una pieza y los hombres en otra. Estaban durmiendo y uno de los primos de mi viejo sintió a alguien caminado por el pasillo hacia su pieza, pensó que era una de sus hermanas y no pesco, entraron a la pieza de los hombres y cuando éste weón miró cachó que era un weon robusto, un hombre, siendo que los únicos hombres de la casa estaban en esa pieza, el weón transpiraba y transpiraba, dice mi viejo que dejó las sábanas mojadas, le pegaba patadas al hermano que estaba durmiendo en la misma cama y el hermano también estaba despierto, los dos cagados de miedo. Como la cama estaba a baja altura y estos weones no se querían ni mover no le vieron la cara, sólo que el weón entró, se paró justo en su cama y después salió de la pieza. Fueron a despertar a mi papá y resulta que los tres weones estaban despiertos y vieron al weón entrar a la pieza, prendieron las luces y en la casa no había nada, ni los perros ladraron ni las minas estaban despiertas a esa hora. La tía tuvo que hacer una limpieza con ruda al otro día.
Una wea que le pasó a mis viejos fue que mi mamá quedó embarazada de mi hermano, así que como se hacía en esa época había que casarse aunque vivieran pobres, así que se fueron a vivir a una pieza de las que tenían mis abuelos en arriendo. En esa época mi abuelo ya estaba muy cagado de salud, y vivió sus últimos años en cama. Mi abuelo siempre decía que veía weas en la pieza, pero como ya su enfermedad lo hacía delirar por ratos nadie podía hacer nada ni tampoco perseguirse con las cosas que decía. Mis viejos tenían su pieza que al mirar hacia afuera por la ventana, se veía la ventana de mi abuelo, y entre medio un patio de tierra en el que jugaban los perros mierderos que tenían y que dejaban el patio lleno de caca, según mi mamá recuerda.
Mi abuelo comenzó a llorar y llamar a mi papá y a mi abuela, y mis viejos escucharon unos golpes como cuando alguien toca la puerta, pero cuando bajaron no había nadie y mi abuelo seguía postrado en la cama, según mi abuelo alguien venía a buscarlo y molestarlo y le golpeaba la ventana. Mi viejo trató de no perseguirse tanto (a esas alturas él y su hermano que estaba separado, eran los únicos hijos que quedaban en la casa y ya no hacían la ouija) Y subió a la pieza con mi mamá. De nuevo sintieron al viejo quejándose y el golpeo al vidrio, mis viejos salieron a mirar por la ventana, y vieron que no había nadie pero seguían golpeando el vidrio, y el viejo dentro llorando, mi mamá confirma esta wea (a todo esto mi mamá tiene su propia historia con weas de fantasmas, pero nunca la cuenta porque es una historia super dolorosa). En el año 1990 nací yop mi abuelo murió un mes después, siempre me viene a ver en sueños cuando quiere algo, avisa algo o quiere que lo vayan a ver al cementerio. Todos mis tios que han soñado con el siempre dicen que el me cuida, quizá por eso a mi no me pasa ninguna wea, a diferencia del resto de mi familia. Es curioso que cuando era chica ya conocía su cara a pesar de que nunca lo vi en fotos hasta que ya era grande, y no tenía conciencia como para recordarlo al tener un mes de vida.
Otra wea que le pasó a mi viejo ya casado en esa casa es que sintió boches en la pieza de al lado, fue a mirar, y no había nada. Cuando volvió a su pieza le habían sacado la ventana completa, con marco, vidRios y todo. Ya no estaba, desapareció en un par de segundos, sin ruidos ni golpes, y la encontraron dos cuadras más abajo en la calle.
Por esta sesión es sólo eso, para la próxima les voy a detallar qué fue lo que pasó con la casa, con mi abuelita y cómo los hijos y los nietos de alguna forma seguimos ligados a esas weas paranormales, sobretodo el gordo antronero de mi hermano, wea que sueña wea que pasa (no es @HITMAN).
PARTE I:
http://www.antronio.cl/threads/la-f...i-abuelos-y-bisabuelos.1250812/#post-22976540
PARTE II:
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PARTE III:
http://www.antronio.cl/threads/la-familia-de-mi-viejo-iii-parte-fuera-de-la-ouija.1251636/
PARTE V
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