Es que la respuesta a tu enfoque es... tu enfoque. Vale, los individuos de alguna manera se transmutaron y firmaron el contrato social, sin embargo, no hay nada en ese contrato que les diera algo. Esa gente, no es gente. Un antisocial no se integra a la sociedad; es lumpen, parásitos, piratas, zánganos, cáncer.
No hay -o al menos no conozco- la respuesta de cómo alguien puede cambiar de tener algo rápido y fácil al esfuerzo, ya que para cambiarlo, necesitas reeducarlo y para hacer eso, tienes que tener una voluntad que ningún gobierno pusilánime de occidente tiene. Corea del Norte la tiene, pero estamos tan mal como sociedad que tan solo citar a ese país es ya un pecado.
Por otra parte, el ladrón desprecia a la clase trabajadora, la considera "oveja", ganado, gente que no piensa más que en vivir para trabajar y obvio, si lo que roba en un día puede ganar lo que trabajando no lograría en años. Entonces, uno debe poder considerar todas estas variables.
La otra opción siempre es pasar por las armas, pero ahí volvemos a chocar con la realidad pusilánime de occidente como sociedad, que no gobierno.