Desde que llegó a la Moneda que la izquierda tenía como objetivo, hacer pebre a Piñerín. Para peor, el wea se entregó solo a que lo hicieran. Una de las cosas a no olvidar en el mundo público es la empatía y nadie de la derecha es empático. Eso al tiro es mala publicidad. Lo otro es el nulo manejo político de los primeros ministros. Ni Ravinet se salvó, siendo que fue alcalde de Haitiago. Salvo el ministro de Hacienda y un retornado Mañalich, los demás no aprendieron nada de como manejarse ante los mediso que sabes que te van a buscar la duodécima al gato con tal de cagarte. Es cosa de mirar las declaraciones de los ministros que terminaron cortando.
Lo otro es precisamente lo que no tiene la derecha y es el manejo político. Aprovechándose de la ignorancia del berterío, empezaron a prometer cosas y a movilizar gente. La consigna pega más que el argumento. La derecha no acusó el golpe hasta que fue demasiado tarde. Bachelet, a pesar de haber tenido un mal gobierno (y que si no fuera por la prudencia de Velasco en Hacienda, nos habría ido peor con la crisis del 2008) y en gran medida ser responsable de cientos de muertes en el terremoto del 2010, por su inoperancia, salió ganando lejos, aunque ya era previsible en 2011 (en
las RRSS, yo tiré que salía la vieja, cuando Piñera llevaba recién un año de gobierno, aunque cualquiera lo hubiera hecho), porque al final era la única candidata que realmente reunía los requisitos de popularidad que la NM necesitaba para volver a chupar la teta del estado.
¿Cómo será el escenario de aquí en adelante? Dantesco para la izquierda. Aunque nunca se debe cantar victoria antes de tiempo, tal como dicen los cimpadritos, las protestas ya no pegan como antes. Ya nadie compra las consignas de nueva constitución, ni de EDUKAZION GRATUITA Y DE KALIDAHHH, porque cacharon que para eso, se requiere pagar más impuestos. Eso es esencial que el berterío lo sepa. Porque no puedes crear algo gratis sin que nadie lo pague. Y como todos sabemos, el IVA lo traspasan al consumidor, más otros impuestos. Si bien la quiebra de empresas se ha dado ahora último, para nadie es un misterio que esto empezó al menos 4 años antes. Súmale eso a la importación forzosa de sonrisas sinceras. La gente ya es difícil que compre. Y ahí es donde hay que manejarse. Aunque no lo crean, sea abusheando videos en jewtube, o entablando debates en torno a como esto afecta al nacional, la izquierda empieza a sucumbir. Actualmente no tienen candidato y ya no pueden echarse atrás con su propuesta de "hermandad y fronteras abiertas". Los mismos soyeros con cada opinión que dan, se desacreditan solos. Súmale que ya tenemos venecos mendigando en las calles. Para muchos eso significa que lo grisáceo nunca fue malo. Eso es lo que hay que explotar. Sería una cagada monumental de Chile Vamos si lo arruina (aunque como son, quien sabe
)