“Aida Monumental Opera On Fire” se centra en el fuego como elemento básico, que representa los componentes principales de la ópera. El director Joseph Rochlitz, quien entre otras composiciones, es autor de la pieza Vide Cor Meum del filme Hannibal de Riddley Scott, señala que “el fuego representa los tres elementos básicos en la ópera: política, religión y amor. Es un símbolo de guerra y del aspecto más destructivo de la política. En la religión, representa sacrificio, limpieza y el aspecto divino en sí. Y el punto más importante, es que el fuego es el más simple y poderoso símbolo del amor ardiente.”
Los montajes de Aida siempre han sido de alta envergadura, incluso cuando debutó en El Cairo, su costo excedió cualquier producción de la época. Con Aida, Verdi creó una obra maestra cuya trama se desenvuelve reflejando problemas políticos y el amor apasionado y doliente. Aida Monumental Opera On Fire, continúa este legado y también se convierte en una de óperas más ambiciosas en todo el mundo.
La producción de Aida contiene 200 vestidos, un elenco y staff de de 300 personas compuesto por solistas, bailarines, coro, técnicos, ballet y músicos que se desenvuelven en un colosal escenario con una enorme pirámide central.
A esto se suma una pantalla gigante de 26x12 metros de altura, 32 cajas con efectos, sistemas de gas y seguridad, un escenario con un peso de 27 toneladas, elaborado con 6 toneladas de madera y 21 de fierro.
La grandiosa pirámide central de la puesta en escena pesa 4.300 kilos, tiene 6 metros de ancho y 6,5 metros de alto. Construir este apoteósico escenario lleva 16 horas, el ancho de éste es de 26 metros, con una profundidad de 21 metros y las estructuras en el escenario tienen entre 5,3 y 12, 5 metros de altura.
La historia de Aida se desarrolla en el antiguo Egipto, país en inminente guerra con Etiopía. Radames es el comandante del ejército egipcio, quien guarda un gran secreto: su amor incondicional por la princesa del país enemigo, Aida. Pero la hija del faraón, Amneris está enamorada de Radames y decidida a ganar su amor. Mientras se desarrolla este triángulo amoroso, se declara la guerra entre Egipto y Etiopía y Radames lidera las tropas egipcias. Es entonces, cuando Aida se ve atrapada entre dos amores: Radames y su país natal además de su padre, el rey.
La guerra es ganada por Egipto, Aida y su padre son prisioneros del faraón y Radames es acusado de traición por revelar secretos de guerra a la princesa etiope.
El origen de Aida es en las excavaciones del arqueólogo Auguste-Edouard Mariette. Además de su trabajo científico, Mariette se dedicaba a escribir novelas e inspirado en sus investigaciones en Thebas y Memphis creó una historia que se centraba en el amor de dos princesas rivales por un mismo hombre. Cuando se abrió el Canal de Suez, Verdi fue invitado para componer una ópera y aunque su respuesta inicial fue negativa, se interesó una vez que escuchó la trama del libro de Mariette, en el cual se basó para componer Aida.
La orquesta de “Aida Monumental Opera On Fire” figura bajo la dirección del Maestro Walter Haupt, quien fue director de la Orquesta Filarmónica de Munich, la Orquesta Sinfónica Orf en Viena y es reconocido a nivel mundial por llevar la ópera a un formato monumental.
Parte esencial de la producción son también la coreógrafa y ex bailarina de La Scala, Simona Chiesa y la puesta en escena de Pier’ Alli.
“Aida Monumental Opera On Fire”, ha recorrido Alemania, Francia, España, Inglaterra e incluso ha llegado hasta el desierto de Abu Dhabi, donde fue montada en los jardines del hotel más lujoso del mundo, Emirates Palace y ahora estará en Chile, convirtiéndose en una de las producciones imperdibles de este año por su magnífica y monumental puesta en escena, efectos visuales, la participación de importantes solistas, destacados expertos e intérpretes y por supuesto, el legado del gran Giuseppe Verdi.